Las características de la agricultura familiar, tal como lo indica la Ley 27.118 de Reparación Histórica, requiere del diseño de políticas públicas diferenciadas; incluidas las sanitarias y de inocuidad de los alimentos.

En tal sentido, a Coordinación de Agricultura Familiar del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Agroalimentaria (Senasa) implementa, a través de su Programa Nacional, integrado por más de un centenar de agentes, una serie de acciones mancomunadas, realizados por los equipos territoriales, a los efectos de fortalecer la producción de alimentos inocuos, y con el objetivo de llegar por medio del consumo a la mayor cantidad posible de habitantes de nuestro país.

De manera directa o indirecta, estos agentes tienen la responsabilidad de acompañar técnicamente a esta clase de producción, vigilando la sanidad e inocuidad de los alimentos en el recorrido comprendido desde la base de producción hasta la mesa de los consumidores argentinos.

La presidencia del Senasa promueve que los productores estén registrados e ingresen a los programas sanitarios vigentes. Continuando con estos lineamientos estratégicos del organismo, cada Dirección Nacional y cada Centro Regional tiene como referente, a una persona en Agricultura Familiar junto a un equipo territorial integrado por personal especializado en áreas tales como calidad de alimentos, sanidad animal e inocuidad y protección vegetal.

Al respecto, Lucia González Espinoza, coordinadora de Agricultura Familiar de Senasa, afirmó que “este año, frente a la situación alimentaria y económica que atraviesa nuestro país, y a pesar de la adversidad que nos planteó la pandemia para el trabajo de nuestros agentes; las autoridades del Senasa definieron claramente la necesidad de fortalecer la tarea del organismo con los agricultores familiares”.

En tal sentido, la coordinadora agregó que estos equipos regionales se han conformado por primera vez en algunas regiones, en tanto que otros, han crecido significativamente. "El compromiso del personal en el acompañamiento y respuesta a las problemáticas que se nos plantean, es cada vez mayor", señaló.

En un contexto mundial marcado por la pandemia, tanto la situación económica como la alimentaria en Argentina se convirtió en un escenario preocupante. No obstante, a pesar de las adversidades, el fortalecimiento en la relación del organismo con los agricultores familiares, provocó que se pongan en movimiento estos equipos regionales. Los mismos articulan y coordinan acciones sanitarias con otras instituciones del Estado nacional, como el INTA y la secretaria de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena, con provincias, municipios y organizaciones del sector, como estrategia clave para poder avanzar en la temática dentro del territorio.

Para Verónica Frigidi, referente de Agricultura Familiar del Centro Regional La Pampa San Luis del Senasa, “la idea es apoyarnos en la distribución geográfica de las oficinas y tener presencia en los territorios con nuestros profesionales vinculados a la sanidad animal, protección vegetal y la inocuidad de los alimentos".

El referente del equipo territorial del Centro Regional Buenos Aires Norte del Senasa y jefe de la oficina de Magdalena y Verónica, Guillermo Cotter, expresó que "desde hace ya diez años que acompañamos al sector productor de tamberos de esta zona. Al principio, trabajamos sobre la formalización a través de la inscripción en el Renspa como Tambo Familiar para que represente su condición real de producción en nuestras bases de datos".

Cotter hizo referencia al acompañamiento que se realizó al INTA, a la Facultad de Ciencias Veterinarias de La Plata y a distintos municipios, con el saneamiento de brucelosis y tuberculosis, además del trabajo sobre producción de leche fluida con la incorporación de tecnologías acordes a la escala familiar. Al respecto, manifestó que “ahora los productores podrán ensachetar y pasteurizar la leche que producen para la venta a bajo costo en mercados de proximidad”, dejando en claro que el trabajo que realiza con su equipo es apoyar y acompañar en los controles higiénico sanitarios y de inocuidad.

Con el equipo a su cargo, se trabaja en impulsar la vinculación con las autoridades sanitarias provinciales y municipales a los efectos de coordinar las habilitaciones correspondientes.

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