Durante una charla en el marco del evento virtual Todo Maíz + Sorgo, Guillermo García,vicepresidente de Ciara-CEC,afirmó: “Argentina se constituyó nuevamente en el segundo exportador mundial de maíz, un puesto que supimos tener allá por la década del’90”.

Es que según fue reportado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), se estima unasuperficie récord sembrada total de maíz con destino grano comercial de 7.100.000hectáreas para la campaña 2021/22. La actual proyección refleja un crecimiento interanual del área sembrada del 7,5 %, unas 500.000 hectáreas por encima de la campaña previa, y un incremento del 15 % en comparación al promedio de los últimos cinco años.

En contraposición, por los avatares climáticos, la producción de Brasil muestra el peor rendimiento en 10 años. Se proyecta que la recolección de maíz en el vecino país sea de 51,6 M de toneladas de granos amarillos, una fuerte reducción de casi 19 Millones de toneladas respecto del ciclo anterior. Es por motivo del clima en las zonas productoras del país tropical que continúa afectando la productividad de la cosecha del maíz de safrinha, primero afectado por la sequía, ahora por las heladas.

En el mercado mundial continúa la limitada la oferta del grano, con incertidumbre para la producción norteamericana, mientras que la demanda de la República Popular China aunque intermitente, continúa pujante.

Implantado después de la trilla de la soja, el maíz de safrinha es el principal cultivo de maíz del país vecino y significa del 70% al 75% de la producción de maíz de la campaña brasileña. Con estos resultados, el país tropical no solo cedió el segundo puesto a nivel mundial en el ranking que lidera Estados Unidos sino que deberá además importar maíz argentino para abastecer su mercado interno.

“Tenemos más de 100 destinos en todo el mundo para el maíz e incluso este año volvimos a abastecer con un buen volumen a Brasil, que está sufriendo una seca importante. Ya tenemos embarcadas y comprometidas unas 600.000 toneladas (con destino Brasil)”, detalló García.

El vicepresidente de Ciara-CEC graficó la situación para el mediano plazo: “Aún con Brasil recuperando producción el año que viene y volviendo a ser un líder exportador, nosotros vamos a competirle palmo a palmo si seguimos incrementando el área en la Argentina y, clima mediante, aumentando la producción”.

Durante el encuentro, se planteó además un posible aumento en los derechos de exportación para los granos amarillos. En el caso de maíz y trigo, tributan un 12% y según la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva, pueden llevarse al 15% (3 puntos porcentuales de aumento) sin necesidad de pasar por el Congreso.

El especialista en el cultivo Pablo Adreani alertó con respecto a este tema que existen "altas probabilidades que se aumenten retenciones", en tanto que el secretario de Agricultura, Jorge Solmi, apuntó: "tenemos que analizarlos en el contexto, ese 3% no tendría efecto por las variaciones en el precio internacional de los granos".

En la coyuntura actual de incertidumbre en la oferta por el clima en Brasil y Estados Unidos y una firme demanda asiática, según Adreani se espera "una suba inminente en los precios de Chicago, por las posiciones compradoras de los fondos de inversión".

De cualquier manera en Argentina la bajante del Paraná sigue planteando dudas e incertidumbre para el futuro cercano y muchos sobrecostos en logísticapara el presente por las complicaciones en las cargas del puertos del Gran Rosario que ya generaron un récord de despachos en el puerto de Bahia Blancaen reemplazo de los puertos santafesinos.

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