Brasil, el nuevo epicentro de la pandemia
Brasil se ha convertido en el principal foco de la pandemia a nivel mundial y ya se ubica segundo en el ranking con más muertes.
Por Ignacio Lautaro Pirotta | 12-06-2020 05:00hs
Con más de mil muertos por día y un total de víctimas que supera las cuarenta mil, Brasil se ha convertido en el epicentro de la COVID-19. El país con dimensiones continentales y una población de 210 millones de habitantes, tiene, además, una creciente circulación del virus en todas las regiones.
Algunos estados ya tienen su sistema de salud al borde del colapso, con filas para recibir la atención médica y acceder a los respiradores. Es el caso de Río de Janeiro, Amazonas, Pará y Pernambuco. En San Pablo, donde las víctimas llegan a las diez mil, las unidades de terapia intensiva disponibles comienzan a acabarse. En el Gran San Pablo, la zona de Brasil más afectada, la ocupación de UTI’s es de más del 90%.
La respuesta del gobierno de Jair Bolsonaro no solo consistió en la negación de la pandemia, sino también en la repetición de teorías conspirativas y la campaña por el uso de la cloroquina, medicamento sin evidencias científicas sobre su efectividad. Además, el presidente brasileño ha utilizado la crisis para trabar una disputa política con los gobernadores, responsabilizándolos por la crisis económica en tanto las medidas de aislamiento social fueron adoptadas por estados y municipios ante la inacción del Gobierno nacional. Paradójicamente, Bolsonaro ha comenzado a responsabilizar a los gobernadores por el avance del virus.
En medio de esta disputa, en las últimas semanas varios gobernadores y alcaldes han iniciado la flexibilización de la cuarentena, de modo de retomar la actividad económica. Es el caso de Río de Janeiro y San Pablo, donde por ejemplo los shoppings han vuelto a funcionar, aunque con importantes medidas de protección. En parte, el regreso de la actividad económica puede explicarse por el ahogo financiero de los estados. El pasado 3 de junio Bolsonaro vetó la transferencia de fondos, aprobada por el Congreso, de 8.600 millones de reales a estados y municipios.
El Gobierno nacional, además, cambió en dos oportunidades al ministro de Salud en plena pandemia. Las presiones que impulsaron la salida de ambos estuvieron relacionadas con la aprobación del uso de la cloroquina y medidas de contención más blandas. El actual ministro de Salud es Eduardo Pazuello, general del Ejército en licencia temporal, quien ha desembarcado en el ministerio acompañado de otros hombres, también provenientes del Ejército.
El Banco Mundial prevé para 2020 una caída del PBI brasileño de 8 puntos, siendo que hasta febrero de este año, la proyección estimaba un crecimiento del 2%. Es decir, con posterioridad al estallido de la pandemia la proyección se redujo en 10 puntos.
La tasa de muertes por millón de habitantes es relativamente baja (199) cuando se la compara con Estados Unidos (353), España (548), Francia (434) o Italia (541). Además, gracias a las medidas de contención adoptadas por gobernadores y alcaldes la curva epidemiológica de Brasil nunca fue tan pronunciada como la de esos países. Sin embargo, dada la trayectoria de crecimiento de casos y el hecho de que hoy Brasil es el epicentro de la pandemia, ese dato optimista también podría verse como un indicio de que la situación aún puede empeorar mucho más