Por estos días, el ministro de Economía, Martín Guzmán, recibió un pedido de audiencia con carácter de "urgente" de parte de las tres cámaras que agrupan a las empresas elaboradoras de bioetanol de maíz y de caña de azúcar. La solicitud se realizó a través de una carta en la cual explican acerca de la situación dramática por la que atraviesan.

Los responsables de las cámaras le expresaron al Ministro que se encuentran en una situación de carácter “terminal” y que necesitan de una solución política y económica para el precio del bioetanol.

Las razones expuestas por las cámaras apuntan a la ausencia de un precio que permita satisfacer los costos operativos, amortizaciones, impuestos y una rentabilidad razonable. Aducen a las autoridades nacionales que es lo exigido por la ley y su normativa .

En otro párrafo de la misiva y en donde reclaman la urgente intervención de la cartera económica, piden “evitar que la industria nacida en el gobierno de Néstor Kirchner, sea ahora sepultada, a pesar de la rica realidad que representa en el interior de la Argentina desde el punto de vista ambiental, social y económico”.

Los representantes de las cámaras indicaron que el estado actual de la producción es el resultado de un proceso iniciado en octubre de 2017, cuando empezaron sucesivas revisiones de procedimiento para determinar el precio, siempre perjudicándolo, a lo que sobrevino el congelamiento desde diciembre de 2019 y el paupérrimo incremento del 10% otorgado en octubre pasado.

El planteo al Ministerio de Economía es llegar fundamentalmente tanto a una solución política como económica, recordando que, en 15 años, ese sector captó cientos de millones de dólares en inversiones genuinas beneficiando a la Argentina.

En tal sentido, y en otro pasaje del texto, recuerdan que, “el bioetanol evitó importaciones de naftas en 2019 por u$s 520 millones y la capacidad industrial instalada está en condiciones de sustituir importaciones por otros u$s 260 millones anuales”.

Índice de Precios Internos al por Mayor

Los ejecutivos resaltaron que la variación acumulada del IPIM entre abril de 2018 y noviembre de 2020 fue de 201% y el de la nafta súper de 144%.  En el caso del bioetanol de caña de azúcar sólo fue del 103%.

Otros porcentajes y cifras suministrados por las cámaras

Para el sector azucarero estimaron las pérdidas de este año en $ 3.741 millones. El producto ni siquiera tiene una fórmula de precio vigente que debería ser de $ 48,368 por litro frente al precio oficial de $ 32,789 por la misma cantidad.

La adquisición de materia prima cubre más del 60% de los costos de producción, ya que aumentó un 72,5. “El bioetanol de maíz solo aumentó un 10%”, informaron los ejecutivos.

Con este escenario dramático, los empresarios manifestaron que, “las consecuencias son previsibles: paradas de planta, suspensión de personal, quebrantos generalizados y una creciente judicialización de la crisis”.

La nota fue firmada por los titulares del Centro Azucarero Argentino, Jorge Feijóo, de la Cámara de Bioetanol de Maíz, Patricio Adam, y de la Cámara de Productores de Biocombustibles en Origen, José Porta.  Fue remitida con copia a los gobernadores de las provincias productoras: Jujuy, Salta, Tucumán, Córdoba, San Luis y Santa Fe.

“Nuestra propuesta concreta es: publiquen el precio que corresponde, menos una quita de 14% en diciembre, en enero un 7% menos, en febrero un 5% menos y en marzo estaremos normalizados”, manifestó Feijóo.

El mes pasado, estas cámaras propusieron “resolver el problema del precio dentro del marco jurídico vigente, pero no obtuvieron ninguna respuesta.

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