¿Y los docentes qué piensan? El Jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, anunció ayer muy orgulloso en una conferencia de prensa, junto a parte de su equipo, que la Justicia decidió que en territorio porteño, en el marco de su autonomía, se mantenga la presencialidad de las clases. Por su parte, el presidente Alberto Fernández tildó de "estrago jurídico" a la nueva resolución. Mientras todos opinan, argumentan y justifican hay un espacio que pareciera que no tiene voz. ¿Qué quieren los maestros?

Tire y afloje en tiempos de pandemia

La semana pasada dentro de las restricciones dictadas por Nación, para resguardar a la sociedad del aumento de casos por la COVID-19, el presidente Alberto Fernández anunció que a partir del lunes 19 se suspendían las clases presenciales en toda el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) hasta el 30 de abril. El Gobierno porteño puso el grito en el cielo argumentando que desde su sector no fueron consultados sobre ninguna de las medidas que se tomaron, acusando así que el Gobierno de Fernández había roto "el mecanismo del diálogo y consenso" que venían sosteniendo.

Uno de los temas protagónicos de la confrontación fue el hecho de que las clases dejen de ser presenciales. Mientras Nación lo vio como una herramienta para cuidar a la sociedad y calmar los contagios, el Gobierno de la Ciudad se mostró en total desacuerdo sosteniendo así que "no hay razón sanitaria que justifique, en este momento, suspender las clases presenciales por dos semanas", argumento que lo llevó a presentar un amparo ante la Corte Suprema.

Clases presenciales: mamarracho y estrago jurídico

Ayer, casi a última hora, cuando nadie sabía que iba a suceder al día siguiente con el tema clases, y más de un docente ya había preparando su clase de forma virtual por lo que determinó presidencia, el Jefe porteño brindó una conferencia de prensa junto a su equipo y anunció que la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo, Tributario y de Relaciones de Consumo de la ciudad de Buenos Aires había determinado que en territorio porteño, en el marco de su autonomía, se mantenga la presencialidad de las clases. En este contexto subrayó que la resolución estaba basada en la evidencia, "recogiendo la opinión de los expertos nacionales e internacionales y teniendo en cuenta el bienestar integral de las personas". Dentro de su discurso asumió que si bien el virus sigue circulando," incluso con mayor rapidez",  no se trata de "elegir entre la educación o la salud de los chicos y sus familias, si no de aprender a convivir con el virus cuidando el bienestar integral".

Frente a esta decisión que determinó la Cámara de Apelaciones de la ciudad de Buenos Aires y anunció Larreta, fue Martín Soria, ministro de Justicia y DDHH de la Nación, quien salió en su Twitter con los botines de punta a responder, sosteniendo así que Fernández había tomado una decisión de Estado para preservar la vida de miles de argentinos, "no dictó políticas educativas", aclaró, y manifestó que "utilizar políticamente al Poder Judicial era una especialidad del macrismo, pero esta vez han ido demasiado lejos". Como si esto fuera poco, remarcó que "este mamarracho jurídico sólo tiene una explicación, y es política".

Si bien este argumento tuvo apoyo de muchos usuarios, quien le dio favorito y replicó sus palabras fue nada más y nada menos que el Jefe de Estado, quien en una entrevista realizada por el medio "El Destape" respecto al tema, afirmó que el fallo de la Justicia porteña genera "un estrago jurídico" porque toma medidas que son "del exclusivo resorte de la Justicia Federal".

Clases sí pero con paro de actividades

Tras el fallo, los gremios docentes porteños UTE (Unión de Trabajadores de la Educación), Ctera  (Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina) y Sadop (Sindicato Argentino de Docentes Privados) anunciaron un paro de actividades para hoy, al advertir que "la salud y la vida son prioridad" y que el cuidado de la sociedad está "dado por el respeto a las normas establecidas". En tal sentido fue Eduardo López, secretario General de la CTA de la Ciudad de Buenos Aires, secretario Gremial de CTERA y General Adjunto de UTE (Unión de trabajadores de la educación), quien utilizó sus redes sociales para transmitir que "tres jueces porteños decidieron que 800 mil personas tengan clases presenciales" en territorio porteño, pero lo trabajaron "de manera virtual y a distancia, para no contagiarse".

Salud

El Ministerio de Salud salió también a dar sus explicaciones y definiciones respecto al tema y advirtió que la presencialidad en las escuelas puede implicar un bajo riesgo individual pero alto riesgo colectivo, según el análisis epidemiológico. ¿Qué significa esto? La Cartera aseveró que el riesgo de contagio puede ser considerado bajo si se acompaña con el adecuado cumplimiento de las medidas de prevención, y destacó que en un contexto de aumento de la transmisión comunitaria o en áreas de alta incidencia, quienes asisten a establecimientos escolares (estudiantes y personal) "tienen más probabilidad de enfermar". En esta línea advirtió que "cuanto mayor es la circulación de personas, mayor es la transmisión del virus".

Para ser más claros desde el Ministerio de Vizzotti plasmaron diversas experiencias en distintos países, y mostraron la relación entre la disminución de la presencialidad o cierres de escuelas y disminución en los niveles de transmisión. ¿Cómo estamos en Argentina?

• En las últimas semanas el AMBA ha experimentado un aumento exponencial de casos, con una velocidad mucho mayor a la primera ola y con circulación de nuevas variantes de preocupación, más transmisibles y letales
• Hay más de 3 millones de niños, niñas y adolescente en edad escolar y aproximadamente 300.000 docentes y no docentes, sumado a los acompañantes, que se movilizan diariamente
• Desde el inicio de clases, con presencialidad alternante, se incrementó un 25% el uso del transporte público
• El análisis de la curva epidémica en el grupo de población en edad escolar indica que desde el comienzo del ciclo lectivo se ha producido un aumento exponencial del número de casos, similar y aún mayor a lo observado en la curva de la población general
• Comparando las dos semanas previas al inicio de clases y las últimas dos semanas, se observa que los grupos de edad escolar presentan un aumento proporcional mayor al resto de las edades

La pregunta que nadie se hace, ¿qué piensan los docentes?

Entre una disputa donde padres y madres juntan firmas para que vuelva la presencialidad, y el Gobierno nacional y de la ciudad se encuentran enfrentados por diversos cuestionamientos, El Agrario dialogó con diversos docentes para que cuenten en primera persona que sienten ante toda esta situación.

En tal sentido Federico, de Villa Lugano declaró que "la presencialidad no tiene ningún fundamento pedagógico lo suficientemente fuerte como para ignorar la emergencia sanitaria", y reflexivo confesó que le daba vergüenza ser argentino, pero aún más pertenecer al territorio porteño donde se ve un gobierno que solo muestra "interés político, prevención y codicia".

Por su parte Carolina de Villa Riachuelo sostuvo que los docentes también están divididos , y narró la experiencia que vive en la institución donde da clases afirmando que allí "hay muchos docentes y familias contagiadas", "los chicos, sin intención alguna, llevan y traen el virus porque vivimos en pandemia". Además la docente aseguró estar muy triste "con la falta de respeto con la que están tratándolos". "Planifique todo virtual, y ahora vuelvo a cambiar mi programa", aseveró.

Cintia de Liniers fue concreta y disparó "hay muchas burbujas pinchadas y de eso no se habla", manifestando así que hay muchos docentes que están de licencia por ser de riesgo y "no hay suplentes para cubrirlos". "Jamás nos llegaron las máscaras o barbijos", sumó. La maestra explicó que "algunas autoridades quieren que se suspenda todo por resguardo a la salud, mientras que por otro lado, otros,  bregan por garantizar que todos los chicos tengan acceso a la educación a través de la virtualidad. Esto iba a suceder, por qué no lo pensaron antes?", remató.

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