La pandemia COVID-19 ha golpeado fuerte a la economía nacional y el sector florícola no es ajeno. Frente el aislamiento,  social, preventivo y obligatorio, la actividad quedó paralizada. Se produjo un cierre masivo de los mercados donde habitualmente se comercializan flores y plantas, poniendo en riesgo la fuente de ingresos de numerosas familias.

En una entrevista exclusiva con El Agrario, Pablo Fernando Irie, presidente de la Asociación Argentina de Floricultores y Viveristas (AAFV) que nuclea a los productores florícolas y de plantas ornamentales más importantes del país, explica la difícil situación que atraviesa el sector.

Se trata de un  sector de producción intensiva que data del año 1930 y que con el correr del tiempo fue en aumento convirtiéndose en una importante generadora de fuentes de trabajo de nuestro país, "hoy esos puestos  de trabajo se encuentran totalmente amenazados y en riesgo de no poder continuar”, lamentó el presidente de AAFV.

Según el último relevamiento realizado en el año 2016 por el Clúster Florícola, hoy liderado por la Asociación, el sector genera las siguientes fuentes de trabajo: 2.000 productores primarios, desde donde comienza el cultivo del producto, 9 mercados mayoristas, más de 3.500 puestos minoristas de venta entre florerías y viveros de atención al público.

“Todas empresas Pymes, Micro Pymes y unipersonales. Que generan más de 100.000 puestos de trabajo y cuya mano de obra proviene de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad”.

“Además de aquellos oficios y profesiones de diseño que están ligados a la producción florícola y al consumo de flores, como paisajistas, jardineros, parquistas, planificadores del paisaje y profesionales de arte floral”, agregó el Licenciado Pablo Irie.

Asimismo el presidente de la Asociación explicó que "la producción de plantas y flores motoriza el empleo en una importante cantidad de empresas de insumos como, fábricas de polietileno, media sombra, estructuras metálicas, fábricas macetas, producción de sustratos, fertilizantes, cuidado fitosanitario en laboratorios y maquinarias". Y detalló: “Son todas empresas Pymes, Micro Pymes y unipersonales. Que generan más de 100.000 puestos de trabajo y cuya mano de obra proviene de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad”.

Desde el comienzo de la cuarentena donde el decreto de Necesidad y Urgencia 297/2020 en el Art. 6, inciso 13, indicaba que los productos agrícolas eran productos esenciales, había diferentes interpretaciones sobre el encuadre de la Floricultura.

Ante esta incertidumbre, el 16 de abril, representantes del Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación se reunieron con delegados de la AAFV y cooperativistas a fin de brindar las pautas de la cuarentena administrada para la cadena productiva y comercial de flores de corte y plantas ornamentales.

Según contó Irie, en la reunión convocada por el ministro de dicha cartera, Luis Basterra, “se aclaró que la actividad para los viveros productores primarios estaba habilitada desde el inicio de la cuarentena y que ahora además se le sumaban los lineamientos generales para que se lleve adelante de forma más segura”. A su vez, especificó que “en torno al traslado de la producción, se habilitó el tránsito interjurisdiccional, siguiendo las normativas del Ministerio de Transporte con respecto a la carga transportada y contando además con el certificado de Renspa/Renfo y DTV emitido por Senasa.”

En relación a la apertura de florerías y viveros de venta al público, depende de la autorización total o parcial dependiendo de las negociaciones con provincias y municipios. Asimismo el licenciado explicó que “la venta de plantas y flores no recuperaron terreno perdido, a pesar de recuperar en varias zonas las habilitaciones de ventas a florerías y viveros, se puede estimar que las ventas no llegan a un 30% de su potencial para estos meses”  Y subrayó: “mucho más marcada es la baja de venta de flores de corte por las restricciones de los eventos el mercado se ha contraído aún más”.

Sin embargo vale destacar que en el sector hubo un crecimiento de ventas online y telefónica de plantas y flores, “pero estos modos de trabajo aún no están desarrollado en el sector y queda mucho por avanzar”.

El productor hace eco a la necesidad de los productores y le pide al Estado poder seguir manteniendo sus cultivos, “pasaron más de sesenta días desde el comienzo de la cuarentena, aún existiendo muchas dificultades para la comercialización y con la escasas ventas no se podrán mantener los gastos que esto genera por mucho tiempo más”, manifestó.

Desde el estado se lanzó el  Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), "pero el sector productor Florícola no está alcanzado y ya se hicieron las peticiones correspondientes para conseguirlo para la ayuda de pago de los sueldos del mes de mayo, aun sin éxito",contó Irie a El Agrario.

"Pese a la incertidumbre que se  vive el sector", enfatizó el presidente de la Asociación, “hay muchas ganas de trabajar y la necesidad de seguir adelante. Hemos recibido el apoyo de las Instituciones públicas y privadas, y seguiremos buscando el mejor camino para que podamos seguir ofreciendo flores y plantas,cerró