Según fue reportado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), la siembra de maíz finalizó a nivel nacional con un total de 6,3 millones de hectáreas sembradas y una proyección de producción de unas 46 millones de toneladas, totalizando un millón de toneladas menos que lo estimado al inicio de la campaña.

De alcanzar la proyección de cosecha, el ciclo 2020/21 contaría con un resultado de 5,5 millones de toneladas menos que lo obtenido en la campaña 2019/20.

De esta manera, y según las primeras previsiones de rendimiento del cultivo del grano amarillo sobre la zona central del área agrícola nacional, el nivel promedio temprano se estaría ubicando "por debajo de las expectativas de inicio de la campaña".

"El déficit hídrico relevado durante diciembre afecto el rinde potencial de los planteos tempranos de las provincias de Córdoba, Santa Fe y parte de Buenos Aires", detallaron desde la entidad bursátil bonaerense.

A pesar de esto, las  precipitaciones registradas en el mes de enero y sobre todo las muy abundantes lluvias de los últimos días "aseguran un piso productivo a estos lotes, ya que permiten mantener un buen nivel hídrico durante el llenado de granos y atenuar el impacto en los rendimientos".

Con respecto a los cultivos de soja, las lluvias registradas a lo largo de la última semana mejoraron la oferta hídrica y llenaron los perfiles sobre el centro del área agrícola nacional.

Hasta el momento, un 34% del área implantada atravesaba estadios críticos para la definición de los rindes, en tanto que un 95,7% mostró una condición hídrica entre adecuada y óptima.

Por último, en el caso de la recolección de los cultivos de girasol, se avanzó 2,7 puntos porcentuales durante la semana, llegando a cubrir el 12,5% del total de 1,4 millones de hectáreas implantadas. La estimación de producción en el caso del girasol se ubica en 2,9 millones de toneladas.

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