“Inseguridad, esta vez me tocó a mí”, así comienza su hilo de tweets Francisco Nabais, quien con fuertes palabras, describió cómo, días atrás, sufrió un hecho de inseguridad rural mientras disfrutaba de una cena junto a amigos en una chacra de Carmen de Areco. “Pánico total”, adelantó el afectado respecto a lo que sintió con este hecho.

Tal como describe Francisco en sus redes, todo ocurrió el lunes pasado por la noche cuando se encontraba reunido con 3 amigos. Su perro comenzó a ladrar fuerte y desaforado frente a una ventana con mosquitero, ventana que minutos después fue atravesada por un hombre encapuchado que entró con un arma de fuego. “Quédense todos quietos, no se muevan”, advirtió el atacante.

Frente a esta situación y el desconcierto, Francisco contó que, sus amigos que estaban sentados se pararon, mientras que él pudo escapar por una puerta que estaba abierta. “Salí corriendo para afuera. Fue instintivo. En ese momento el tipo disparó un tiro que pasó por el medio de la mesa y atravesó un vidrio”, subrayó.

“Escuché el disparo y el vidrio estallar. Sentí que me había disparado a mí porque quise escaparme. Así que me tiré de cabeza al piso gritándole que no dispare más que estaba ahí quieto y que no me iba a ir a ningún lugar. Temblando de miedo. En pánico total”, agregó. Al no escuchar más voces, pudo reaccionar y recordó que aún tenía su celular en el bolsillo, agazapado en medio de la oscuridad, se alejó un poco más del lugar de los hechos y llamó a la Policía.

No pido mano dura. No quiero justicia por mano propia. No quiero venganza. Anhelo que Argentina vuelva a ser un país de oportunidades.

“Escuchaba ruidos en el pasto, pasos, perros ladrando a lo lejos. Seguí gateando por la oscuridad hasta que me sentí medianamente a resguardo. Tenía miedo que me escuchen o que vean la luz del celular y me encuentren. Me animé a sacar el teléfono, llamé al 911 y pedí ayuda urgente”, relató la víctima.

Explicó que minutos después llamó a sus amigos, y entre secretos y murmullos pudieron transmitirse que se encontraban bien. “Se habían encerrado en una habitación con el perro. Yo les dije que estaba escondido a resguardo. Que se queden tranquilos. Esperamos como 40 minutos hasta que llegó el primer patrullero”, aseveró, a la vez que realzó que todo indicaría que el atacante se asustó y se retiró de la vivienda sin llevarse nada.

“Una situación horrible, con suerte la podemos contar y estamos todos bien más allá de la angustia y lo traumático del momento. Tuvimos que esperar a la fiscal de turno, a la policía científica de Mercedes, ir los 4 a declarar a la comisaría. Volvimos a casa a las 5 de la mañana”, sumó.

“Pudo haber sido una tragedia. No pido mano dura. No quiero justicia por mano propia. No quiero venganza. Anhelo que Argentina vuelva a ser un país de oportunidades. La falta de trabajo nos está haciendo mierda. En Carmen d Areco no existían este tipo de hechos. La gente está mal”, reflexionó Nabais respecto a lo sucedido.

Trabajo de la Policía Científica

Una fuente cercana a la policía científica le reveló a El Agrario que, frente a estos casos, la investigación comienza luego de la denuncia del damnificado, la cual es impulsada, en este caso, por la Fiscalía de la zona.

En tal sentido, manifestó que es la Fiscalía quien le ordena a la policía local que el lugar sea preservado para que concurra Científica a realizar la inspección ocular de la escena. Este accionar se realiza con el fin de obtener la mayor información posible del hecho que permita definir qué pasó, cómo fue el hecho y si puede saberse quién o quiénes fueron los autores.

Asimismo, sostuvo que la unidad especializada en el relevamiento criminalístico del lugar del hecho, en primer lugar, documenta fotográficamente la escena tal como se encontraba para luego proceder con la inspección ocular de toda la vivienda y sus alrededores. Se procede de esta forma para buscar evidencias químicas, biológicas, huellas papilares, elementos de interés balístico y todo material de relevancia para la investigación.

En consiguiente, el especialista trasmitió que, de la pesquisa realizada en esta oportunidad, pudo observarse un orificio, cuyas características morfológicas son compatibles con las producidas por un proyectil disparado por un arma de fuego, lo que llamaron la atención del perito balístico.

También, destacó que la interpretación y análisis de las improntas de la rotura le permiten al perito poder describir su incidencia, orientación y la dirección del proyectil actuante. “Es por ello que se logró encontrar en cercanía al orificio, un fragmento metálico deformado con similares características a la de un proyectil, el cual fue medido, acondicionado y embalado por el profesional para su remisión al laboratorio balístico para su completo y adecuado análisis”, complementó.

Finalizando, argumentó que la importante tarea de los peritos en la escena permite orientar a la Fiscalía cómo sucedieron los hechos y recolectar indicios materiales que guíen la manera de investigar hacia un determinado lugar o persona. “Por ejemplo, la tarea del personal policial en el laboratorio científico permitirá determinar el calibre del proyectil secuestrado en el lugar y la posible arma que lo disparara”, puntualizó.

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