En el informe semestral presentado por la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), el análisis de composición de precios de la carne arroja como resultado un aumento en la incidencia impositiva en el precio final de éste producto en relación al último informe.

El consumo de carne vacuna, por el contexto de pandemia y cambios en la tendencia de consumo, presentó durante el último semestre una baja que viene siendo profundizada desde los últimos 3 años, ubicándose en 50 kg/per cápita. Y, con un 14,62% de aumento en el precio promedio de la carne registrado por la Fundación en el informe presentado en mayo, se registró un promedio de precio de $372 por kilogramo.

La composición de ese precio promedio, de acuerdo a FADA, se conforma en dos partes: una integrada por loo costos de la cadena, $251,50 pesos del total y otra compuesta por los impuestos que suman los $108,55, a los que se le suman unos $11,83 "del resultado de la cadena". El análisis pormenorizado del valor promedio, la Fundación destacó que la cría representa el 29% ($108,08), el feedlot el 23% ($83,91), el frigorífico el 5% ($18,09), la carnicería el 14% ($53,26) y los impuestos el 29% ($108,55).

La carga impositiva en el valor final se distribuye en impuestos nacionales (impuesto a las ganancias, IVA, e impuesto a los créditos y débitos), que representan un 76% de los impuestos; 19% de los impuestos provinciales (inmobiliario rural, ingresos brutos) y 5% de impuestos municipales (impuesto a la industria y comercio y tasa vial).

En el valor promedio, FADA destacó que se pagó por el ternero un precio promedio de $141,33 el kg. equivalente a $48,50 el kg. de carne al mostrador. El precio promedio de venta del novillo al frigorífico fue de $109,50 por kilo. Por su parte, el frigorífico vendió el kilo de carne "al gancho" a $202,74, un 13% más que lo registrado en marzo de éste año. La carnicería, en tanto, marcó un precio promedio de $336,55 el kilo, mientras que para agosto fue de $293,72.

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