Según fue informado a través de un comunicado, el Banco de la Nación Argentina (BNA) reclamará formalmente ante el juez federal Julián Ercolini que se investigue la transferencia de acciones del frigorífico Friar, propiedad del grupo Vicentin, que habría sido vendido a otro grupo empresario.

En el comunicado, la entidad nacional indicó además, que se presentará en paralelo como querellante ante la justicia rosarina para que “evalúe el accionar de la cerealera, ante la posibilidad de que se genere un vaciamiento del patrimonio de la empresa santafesina”.

El reclamo surge después de conocidas las versiones periodísticas que reportan que Vicentín vendió el 50% del frigorífico Friar al fondo Buenos Aires Finantial Capital (BAF).

“La cerealera concursada continúa con el desprendimiento de sus activos, en una clara maniobra para evitar la cancelación de los créditos, lo que constituye un importante perjuicio para el patrimonio del Banco”, alertó el presidente del banco estatal, Eduardo Hecker.

El grupo Vicentin habría transferido los fondos de dicha transacción a Uruguay, en lugar de utilizar esos recursos para achicar la deuda de más de US$ 300 millones que mantiene con el Banco Nación.

El BNA denunciará también la situación ante el juez Fabián Lorenzini, que lleva el concurso preventivo de acreedores en la ciudad de Reconquista, quien tiene que resolver el incidente iniciado por la Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ) de Santa Fe, que en el momento en que fue decretada la intervención de la empresa por parte del presidente de la nación, había solicitado la intervención del grupo Vicentin por supuestas maniobras de vaciamiento. Para el próximo lunes 7 de setiembre, está prevista una audiencia en Reconquista para analizar dicho pedido del Gobierno santafesino, reunión que aprovecharán las autoridades del Banco Nación para solicitar que se evalúen las acciones llevadas a cabo por el actual Directorio de la empresa agroexportadora.

A este contexto, se suma el informe elevado en el Concurso Preventivo por la consultora internacional KPMG, que acaba de desistir en continuar como auditora externa del grupo Vicentin.

KPMG informó en un escrito presentado ante el juzgado de Lorenzini que “suspendió la auditoría” del ejercicio de Vicentin que cerró el 31 de octubre de 2019 al detallar que “la cesación de pagos del cliente tiene un impacto generalizado en la capacidad de la organización para continuar como empresa en marcha”.

Por último, Hecker exigió por enésima vez, la presentación del balance de 2019 que es considerado “imprescindible” para determinar la situación patrimonial de Vicentin y lograr descifrar lo sucedido durante el año pasado con los multimillonarios fondos en cuestión y adoptar además medidas judiciales que impidan que la empresa se desprenda de activos.

Por un lado, la cerealera enfrenta el concurso preventivo de acreedores ante la justicia de la ciudad santafesina de Reconquista, a cargo del magistrado Fabián Lorenzini; además del concurso, el magistrado Julián Ercolini lleva adelante otra causa donde se investigan supuestas irregularidades en el otorgamiento de préstamos por 18.500 millones de pesos por parte del Banco Nación hacia Vicentin.

De la empresa dependen unas 7 mil familias en forma directa y tiene de acreedores al Banco Nación y a miles de pequeños productores y PYMES.

Fuentes: El Agrario / Télam