Según fue reportado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el uso de la capacidad instalada de la industria nacional se ubicó durante el mes de abril en el 63,5%, 21 puntos porcentuales por sobre el 42% que fuera registrado en igual mes del 2020, momento en que estaban en vigencia severas restricciones y el aislamiento de la población por la pandemia de coronavirus.

El uso de la capacidad de producción industrial fue más grande, incluso, que la de abril del año 2019, "con un aumento de 1,9 puntos porcentuales”, subrayaron desde el Ministerio de Economía, después de que el Indec divulgara los nuevos datos mensuales.

De todos modos, en comparación con marzo del 2021, el nivel de uso de la capacidad instalada registró para abril una reducción de 1 punto porcentual, versus el 64,5% registrado en el tercer mes de 2021.

Estas oscilaciones estuvieron en línea con el desempeño fabril, que en abril creció 55,9% en la comparación interanual con el año del comienzo de la pandemia, y 0,3% en comparación a marzo de este año.

Durante el mes de abril de 2021 los bloques sectoriales que registraron niveles de uso de la capacidad instalada mayores al promedio general fueron Sustancias y productos químicos, con el 75,4%; Minerales no metálicos, 74,7%; Refinación de petróleo, 73,1%; Papel y cartón, 73%; Industrias metálicas básicas, 68,9%; Productos del tabaco, 65,7%; y Alimenticios y bebidas (64,8%).

Mientras que, los bloques sectoriales que registraron un uso promedio debajo del nivel general fueron Edición e impresión, con el 55,9%; Metalmecánica, 53,7%; Textiles, 52,4%; Productos de caucho y plástico, 52,1%; e Industria automotriz, 39,1%.

En el mes de abril, según puntualizaron desde el Palacio de Hacienda, “crecieron de forma interanual todos los bloques que integran el índice con excepción de Edición e impresión”, que registró una reducción de 1,7 puntos porcentuales.

Esto se relaciona a que, fue en el cuarto mes del 2020 cuando más impacto tuvieron las medidas relacionadas con el aislamiento sanitario preventivo y obligatorio (ASPO) puestas en vigencia el 20 de marzo del 2020, luego de que a principios de ese mes la pandemia estallara en todo el planeta. Las diferentes medidas restrictivas impuestas para evitar la propagación del virus afectaron el normal desenvolvimiento de la actividad industrial, aunque algunas actividades consideradas “esenciales” pudieron continuar operando con normalidad.

En comparación con el mes de abril de 2019, mostraron crecimiento 10 de los 12 bloques y el crecimiento más grande fue para Minerales no metálicos, con un alza del 7,5 puntos porcentuales; seguido de producción de Tabaco, con un aumento de 7,1 puntos porcentuales; y Metalmecánica con 7,0 puntos más que un año antes.

Con respecto a la baja de un punto porcentual en la uso de la capacidad instalada versus marzo del 2020, el reporte del Indec indicó que el principal recorte se dio en el sector Automotriz, con una reducción de 15,7 puntos entre ambos meses, seguido de industrias Metálicas básicas, con 10,9 puntos menos.

Las expectativas en el sector fabril, de acuerdo al Indec, son en general favorables.

Desde la cartera económica argumentaron que estos sectores "tuvieron paradas de planta por mantenimiento, para readecuación de nuevas líneas productivas (automotriz) y por reorganización del personal debido al incremento en los contagios de Covid-19”.

Se observó, además, que a lo largo del mes abril “también registraron problemas logísticos ante diversos conflictos gremiales” como el paro portuarios y diferentes conflictos que paralizaron la gestión en el yacimiento de Vaca Muerta.

En este marco, las expectativas en el sector fabril, de acuerdo al Indec, son en general favorables.

En este contexto, el 38,4% de los empresarios consultados por el organismo estadístico opinaron que la demanda interna continuará en aumento hasta julio inclusive, contra un 23,2% que espera una baja, en tanto que el 38,4 % restante no espera mayores modificaciones a la coyuntura.

Opiniones similares generaron las exportaciones, donde el 28% de los empresarios consultados proyectaron una mejora, contra un 18,3% que prevé una baja, mientras que el restante 53,7% no espera mayores cambios.

Seguí leyendo: La actividad pesquera argentina creció más de un 59% interanual