Francia ha premiado a un Torrontés Riojano, entre tres mil vinos de todo el mundo. Un trabajo que lleva más de 34 años en desarrollo. Según el enólogos Jorge Horacio Ruitti, en el año 1987 viajaron a la feria VINEXPO, el mayor evento de vinos del mundo. que se desarrolla en Burdeos, y llevaron, con muchas expectativas, una muestra del trabajo de en la Cooperativa Nacari, en medio de sueños y esperanzas.

De aquella experiencia a hoy, pasó mucho: experiencias, mayor consumo, políticas públicas nuevas que han acompañado el desarrollo vitivinícola en Argentina que se impone día a día en nuevos mercados.

Esta vez, el Esmerilado Nacarí Torrontés pisó fuerte ante sus 3.599 competidores y supo imponer su color, su sabor, la fortaleza de una tierra humilde, pero orgullosa de ser argentina.

En una primera etapa quedó entre las 50 medallas de Oro y posteriormente vino el plato fuerte, cuando se tuvo que elegir al mejor Blanco del Mundo, el Oscar, y allí la garra riojana apareció y dio el presente.

Ese hecho histórico fue clave en el nuevo desarrollo del Vino Argentino, pues es una experiencia única, ganar en Francia con una cepa con ADN puramente argentino, autóctono y 100 % Nuestro, el Torrontés Argentino.

Que se puede decir de este Esmerilado, con un color amarillo verdoso delicado y llamativo, que en la nariz da una expresión frutal con aromas a melón, damasco, ananá y banana, fresco y delicado. En boca, el Torrontés sabe a fresco y de largo final, en el cual solo se siente armonía plena. Estos motivos fueron el por qué, casi 40 años después, sigue vivo en las cartas de los restaurantes del mundo entero, acompañando pescados, ensaladas, aves y pastas mediterráneas, quesos y picadas.

En La Rioja, existe un Templo del Torrontés, en la ciudad de Chilecito, en donde se puede escuchar a algún poeta decir:  "El Torrontés da brillantez a las campiñas, exalta los corazones, enciende las pupilas y enseña a los pies la danza".

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