En los próximos meses habrá una gran mortandad de peces
El especialista en ecosistemas e investigador del CECOAL, Juan José Neiff, afirmó que la bajante del Río Paraná persistirá al menos hasta el verano; ocasionando una serie de consecuencias que afectarían gravemente a la fauna del mismo.
Por Christian Fasani | 21-05-2020 10:00hs
El fenómeno de La Niña viene para sumarse a la falta de lluvias lo que podría generar que el Río Paraná baje más en caudal y se contamine sustancialmente de algas verdes que le darían al agua un gusto realmente desagradable; a esto habría que sumarle que los residuos de cloacas serían dispersados en un menor caudal de agua.
El especialista en manejo de ecosistemas e investigador por el Centro de Ecología Aplicada del Litoral dependiente del Conicet (CECOAL), Juan José Neiff, anticipó que la bajante histórica del río Paraná continuará hasta el verano o, incluso, hasta fines de la estación en 2021.
Un registro de Prefectura Naval Argentina determinó una altura hidrométrica de 70 centímetros en el Puerto de Corrientes y oscila alrededor de esta marca desde el 12 de mayo. Para entrar en una fase de crecida del río, se necesita la llegada de precipitaciones intensas que, por un lado, logren humedecer los terrenos secos y recién entonces comiencen a formar parte de la cuenca. “Se debe producir un excedente a través de lluvias torrenciales”, precisó Neiff
La gran fauna del Paraná está compuesta por mandubíes, pacúes, bogas, armados, dorados y surubíes. Todos serán afectados por el bajo caudal, tanto pequeños como adultos, ya que al no poder llegar al cauce del agua quedarán varados en el barro y en los bañados.
Lamentablemente se verá una gran mortandad de peces ya que los sectores con acumulación de agua serán playos y de poca profundidad.
A su vez, el investigador Neiff remarcó que la concentración de fósforo y nitrógeno en el Paraná ocasionará la aparición de algas verdes que le darán un gusto desagradable al agua. Así, el proceso de potabilización sera mínimo: los efluentes domésticos cloacales y pluviales son recibidos en un caudal menor. Es un fenómeno conocido como eutrofización cultural, en la que el oxigeno del agua es limitado y el fango producto de los altos niveles de nitrógeno densifica el agua al punto de convertirse innavegable e inconsumible.
La bajante será, en los próximos meses, seguida por expertos y concentrará su atención por lo menos hasta mediados de 2021