Suena el celular, otra vez es el grupo de zumba te alienta para que te sumes a la clase online de hoy. ¿Me sumo o pongo una serie? ¿Contesto con buena onda o silencio a todos? ¿Me pongo el equipo deportivo o sigo en pijama?  ¿Y ahora qué hago? La pregunta no es solamente si se puede hacer actividad física en casa, en lo que hay que indagar además es si se quiere hacer actividad física en estás condiciones. De todas formas cada vez son más, y de diferentes edades, los que se suman a esta modalidad virtual para tener un entrenamiento.

El Agrario pudo hablar con profes y dueños de gimnasios para que compartan cómo afecta la cuarentena su vida laboral pero primordialmente su economía. En una primera instancias las grandes cadenas de gimnasio mostraron sus clases de forma gratuita a través de las plataformas de redes sociales, pero ya se hicieron cada vez más visibles los comunicados en dónde afirman que en abril las clases tendrán un costo. Lo mismo pasó con los gimnasios más pequeños, o los profesores que trabajaban de forma independiente y quedaron sumamente comprometidos económicamente con este decreto de aislamiento.

Esteban Martino es profesor de baile y entrenamiento, dueño de un estudio de danza en Parque Chacabuco, Capital Federal, nos contó que la situación lo afectó bastante porque depende puramente de un espacio físico para ganar dinero y así poder pagar sus alquileres y servicios, "a eso hay que sumarle que venimos de enero y febrero, meses donde la gente se toma un descanso generalmente para realizar actividad, muchos se van de vacaciones y baja el trabajo, uno llega justo a fin de mes y si se le suma esta situación es aún peor", agregó.

Similar situación es la que atraviesa Pablo Asorey, dueño de un gimnasio donde se trabaja de forma personalizada haciendo principalmente entrenamiento de pesas, musculación y circuitos aeróbicos. Él nos comentó: "la situación me encontró muy mal, vengo de una mudanza e inversión en este gimnasio nuevo, puse todos mis ahorros y la gente dejó de venir entonces mi ganancia quedo en cero. El alquiler es muy grande, hay muchas cosas que pagar y la ayuda real por parte del Estado es poca".

Respecto al pago de las clases y esta nueva metodología Pablo explicó que está trabajando online, pero aún no cobra sus clases, "hay que tener en cuenta que muchos clientes pagaron el mes completo por adelantado, entonces no corresponde volver a cobrarles. Hay gente que recién arranca con este tema de la tecnología y tampoco les puedo cobrar, les tengo que dar tiempo para que arranquen, prueben y vean si les gusta esta nueva modalidad. Si el servicio sirve y es bueno, está respaldado por los conocimientos y el tiempo del profe, corresponde que después de un tiempo se cobre".

Más allá de que el panorama de la economía no es el más esperanzador en este momento al menos en el rubro, ambos profesores no bajan los brazos y continúan esforzándose. Así lo expresó Martino: "mis problemas siempre los pasé bailando y esta no va a ser la excepción, el cuerpo y la mente se conectan, lo físico y lo emocional están juntos. Si uno está bien físicamente  y ordenado en su rutina diaria, indudablemente te vas  a sentir bien con todo el resto. Hay que tomar conciencia que el cuerpo es el templo de uno".

Por su parte Pablo, quien se relaciona más con musculatura y resistencia, remarcó que "hay que tener disciplina y hay que hacer las cosas como sea, capaz no estás en el lugar que más te motive, no tenés las mejores pesas y la música no ayuda pero la actividad física se puede hacer igual, el cuerpo no sabe si haces pesas con barras o con botellas. Si uno lo quiere hacer, lo hace de la manera que pueda, pero lo hace".

Frente a la metodología que se esta implementando, Martino se mostró comprensivo con su alumnado, quienes recorren diversas edades, y sostuvo: "estoy dando clases online a través de una aplicación gratuita llamada ZOOM, pero investigué otras opciones porque a muchas personas se le tilda, o si anda mal el wifi directamente se corta y la persona se queda sin clase, y así uno pierde un cliente. Ya cambiar una clase presencial por una virtual o videollamada no está muy bueno, algunos se suman y otros no. Pero bajo esta situación no hay muchas más opciones, hay que tomar conciencia, ser precavido y pensar en toda una sociedad. Creé un tutorial como instructivo visual para que todos puedan manejarse bien con internet y las aplicaciones. Acá lo importante es que la gente siga entrenando y pasándola bien para olvidarse un poquito de este problema que nos afecta a todos".

Bajo el mismo concepto, Pablo mantuvo que se encuentra armando videos que motiven a la gente y de esta manera no corte su entrenamiento, " no quiero que tiren por la borda todo el esfuerzo hecho hasta ahora. La gente entrena y tiene un objetivo, quiero que lo sigan llevando adelante", cerró.