Dylan Gómez nació con una miocardiopatía hipertrófica. Tras una  larga cirugía en el Hospital Italiano de Buenos Aires semanas atrás, el pequeño de 4 años recibió un corazón nuevo y su recuperación es favorable, según informaron integrantes del equipo médico a cargo de su atención.

El niño oriundo de la localidad de Villa Berthet, Chaco, pasó por más de una decena de intervenciones quirúrgicas, entre ellas una de las más importantes, realizada en el mes de agosto, fue la colocación de un corazón artificial Berlín Heart, que reemplazó el soporte cardíaco ECMO al que estaba conectado. Este dispositivo que brindó la Obra Social del Personal Rural y Estibadores de la República Argentina (OSPRERA), mantuvo su corazón trabajando hasta recibir el trasplante los primeros días de octubre.

En diálogo con El Agrario Mario Gómez, su padre, expresó: “Todavía no caigo, no puedo creer, nunca me voy a olvidar de este día". Parecía algo imposible, pero su familia nunca perdió las esperanzas. “Hoy Dylan come, toma agua. Está muy bien”, detalló el padre del pequeño.

Espera, lucha y esperanza

Cuando Dylan fue trasladado al Hospital Italiano de Buenos Aires con esta compleja situación cardíaca, OSPRERA intervino como obra social del grupo familiar del pequeño. Atentos a las complicaciones en su salud, se hizo entrega del corazón artificial, dispositivo clave para los meses en los que el pequeño ocupó uno de los principales puestos de la lista de emergencia nacional. El Berlin Heart permitió sostener el flujo sanguíneo y la circulación de forma artificial, manteniendo activo a su corazón hasta el trasplante.

Ramón Ayala, presidente de la obra social, comentó: “Sin dudas ni demoras desde OSPRERA hicimos todo lo posible para responder al pedido de la tecnología solicitada por los médicos con el objetivo de sacar adelante a Dylan de este difícil momento". 

Mario Gómez contó cómo vivió el momento tan esperado. “Esperé tanto ese día, que por suerte llegó y su corazón ya está ahí, latiendo”. Muy emocionado concluyó: “Comienza otra vida, la luchamos muchísimo. Siempre quise lo mejor para mi hijo. Estoy muy agradecido por el accionar de OSPRERA. En los momentos de mayor desesperación la obra social acompañó, asesoró y nos brindó todo lo necesario”.

El donante

El corazón que recibió Dylan era de Luciano, un nene de 9 años que falleció en Salta y se convirtió en el primer donante de órganos del Hospital Materno Infantil de la capital salteña.

La dolorosa despedida de una familia se transformó en la emoción de otra. Los padres de Luciano tomaron la decisión de donar sus órganos, luego de que le diagnosticaran muerte cerebral luego de sufrir un status epiléptico por una afección crónica de convulsiones. Inmediatamente se dispuso el primer operativo de ablación en el Materno Infantil y el corazón del niño salteño llegó hasta Buenos Aires