Guanaco Sombriana: un pueblo en donde el turismo y los tejidos son los protagonistas
Esta pequeña comunidad ubicada en Santiago del Estero, supo hacer del desarrollo del turismo rural y del trabajo textil el motor de su economía.
Por Natalia Marchesi | 05-12-2021 12:00hs
En el interior santiagueño, a 120 km de la capital provincial, se encuentra Guanaco Sombriana, un auténtico pueblo rural rodeado de paisajes áridos y escasa vegetación que presenta un gran potencial a nivel turístico y cultural.
Esta pequeña comunidad cuenta con una ubicación estratégica sobre la ruta Nacional 9 que es vía de acceso a la región turística del norte y por donde transitan turistas que provienen de la zona centro y sur del país.
Guanaco Sombriana logró crecer en el tiempo gracias al trabajo de sus habitantes cuya principal fuente de ingreso es el turismo, actividad impulsada por la subsecretaría provincial de Turismo que acondicionó la zona para promoverla como escenario del turismo natural y rural, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de entrar en contacto directo con la naturaleza, aprender sobre la cultura de su gente y explorar los exclusivos paisajes de la región.
Su principal atractivo son las salinas de Ambargasta, un salar que posee una superficie aproximada de 4200 km², en donde la flora y fauna es típica de ambientes salinos con escasa vegetación distribuida en los bordes de los ríos.
El arte de tejer a telar es otra de las actividades principales fomentada por el Gobierno provincial, junto a investigadores de la Universidad Nacional de Santiago del Estero (UNSE), quienes buscaron mejorar la calidad de la producción introduciendo llamas y guanacos importados desde Jujuy y ovejas desde el litoral argentino.
Gracias a esta iniciativa, se pueden observar una variedad de productos textiles obtenidos a partir de la fibra de las llamas, como chalinas, ponchos y ruanas, entre otros tejidos, elaborados por las mujeres de la región.
Por último, se destacan las artesanías en cuero y muebles de madera y madera con tiento, la elaboración de productos artesanales típicos, como el queso, la producción de miel y la cría de cabras, en donde el cabrito es uno de los platos más solicitados en la gastronomía turística.
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