Mercedes Sosa nació en San Miguel de Tucumán el 9 de julio de 1935 en el seno de una familia muy humilde, hija de zafrero y lavandera.

Su padre, Ernesto "Tucho" Sosa, la anotó como Haydeé Mercedes en el registro civil. Su madre, Ema del Carmen Girón, decía que él lo hizo a propósito para no ponerle Marta Mercedes, tal como ella había elegido. De todos modos, en su familia fue conocida como La Marta.

Se adueñó de la cultura de los pueblos originarios, de la palabra olvidada de los trabajadores, de las mujeres y de los niños. Su canto logró un grito colectivo de libertad, justicia, verdad y dignidad.

A pesar de las carencias materiales, su familia estaba llena de amor. Sus padres debían alejarse del hogar para trabajar días enteros en las duras cosechas. Pero a pesar de las vicisitudes la unión familiar lo pudo todo, y le dio un fuerte sentido de pertenencia.

Esto en Mercedes provocó un gran compromiso con sus sueños, sus ideales y su esperanza. Se adueñó de la cultura de los pueblos originarios, de la palabra olvidada de los trabajadores, de las mujeres y de los niños. Su canto logró un grito colectivo de libertad, justicia, verdad y dignidad.

Por su inquebrantable compromiso con los derechos humanos y su increíble arte logró recorrer infinidad de ciudades del mundo y ser premiada por gobiernos y organismos internacionales.

Su voz permitió que todo el mundo conociera a los creadores de Latinoamérica, logrando el amor y reconocimiento de sus pares y el agradecimiento de su público a lo largo de varias generaciones.

Desde la partida de Mercedes Sosa, se han originado homenajes de reconocimiento y agradecimiento en todo el mundo. Parques, plazas y bosques, calles, escenarios y festivales, bibliotecas, escuelas, centros de salud y centros culturales de todo el mundo llevan su nombre.

Su carrera

Cuando tenía 14 años, sus padres, fervientes peronistas, viajaron a Buenos Aires a celebrar la histórica fecha del 17 de octubre. Mercedes se quedó al cuidado de sus hermanos mayores y con una libertad que nunca antes tuvo, se fue con sus compañeras de escuela a la radio LV12 donde se desarrollaba un concurso para cantantes desconocidos y ganó.

En aquella oportunidad, se presentó como Gladys Osorio para que su padre no la reconociera. Gladys se llamaba una de sus mejores amigas y Osorio era apellido de la chica abanderada de su escuela. Y así siguió cantando en la radio hasta que su padre la descubrió.

Habría transcurrido un mes de aquel episodio y luego de reiteradas insistencias del director de la radio, su padre, le permitió a Mercedes firmar su primer contrato.

A los 16 años ya cantaba en las peñas del Partido Peronista incentivada por sus padres, luego de un tiempo se afilió al Partido Comunista.

“La negra Sosa” siempre tomó clases de canto de la mano de grandes profesores, aun estando de gira por distintos países del mundo. Las ultimas clases las tomo en el 2009 poco tiempo antes de su partida junto a la profesora Carmela Giuliano.

Desde la Fundación Mercedes Sosa,que fue presidida por su hijo, recuerdan lo fundamental que era para Mercedes la selección del repertorio, porque “lo que se graba es para toda la vida”, tal como rezaba.

Detención y exilio

Durante la dictadura militar en Argentina, la detuvieron en pleno recital junto a su guitarrista Colacho Brizuela y a su hijo, el día 20 de octubre de 1978 en “El Almacén de José” de la ciudad de La Plata, en esa oportunidad interpretaba canciones de protesta censurada por el aparato represivo.

Luego de que los efectivos policiales la humillaran durante 18 horas con improperios referidos a su color de piel y su afiliación partidaria, Mercedes se exilió en Europa. Regresó en 1982, para cantar en el teatro "Ópera". 

Grabó junto con Shakira, Luis Alberto Spinetta, René Perez, Caetano Veloso y Joan Manuel Serrat, entre otros.

Mercedes continuó una increíble carrera, en la que compartió grabaciones y escenarios con los artistas más destacados del mundo. Siempre atenta y dispuesta a trabajar en conjunto con los nuevos talentos, en dos de sus últimos trabajos de estudio "Cantora" 1 y 2, grabó junto con Shakira, Luis Alberto Spinetta, René Perez, Caetano Veloso y Joan Manuel Serrat, entre otros. 

El regreso

El 18 de febrero de 1982, “La Negra” recién puedo regresar a un escenario en la Argentina, un par de meses antes que la dictadura se embarcara en la guerra de las Malvinas. Lo hizo en el Teatro Opera de Buenos Aires donde realizó más de una docena de conciertos.

Con estas actuaciones tan esperadas, Mercedes no sólo se reencontró con su público de siempre, sino que allí la vieron por primera vez miles de jóvenes que desde entonces la convirtieron, también, en “su ídola”. De esos trece recitales en el Teatro Opera quedó el LP doble “Mercedes Sosa en Argentina”, en el que también intervinieron sus compañeros de aquellas noches: León Gieco, Charly García, Antonio Tarragó Ros, Rodolfo Mederos, Raúl Barboza y Ariel Ramírez.

Al cabo del ciclo en el Teatro Opera, Mercedes regresó a España, donde estaba radicada, volvió a mediados de año a América para presentar su disco “Gente humilde” y para realizar una serie de conciertos en las principales ciudades del Brasil.

Poco tiempo después regresó definitivamente a la Argentina. Ese mismo año hizo conocer “Como un pájaro libre”, un hermoso disco que incluyó temas de autores tradicionales y otros más jóvenes.

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