Un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, estima que la bajante del río Paraná, la mayor en los últimos 50 años, ha generado pérdidas por un total de US$ 243,9 millones en lo que va del año. Es debido a las dificultades que sufren los buques de gran calado para cargar en los puertos del Gran Rosario y las diferentes complicaciones y demoras que la falta de agua trae aparejadas, que se traducen en mayores costos.

El documento advierte que, “semana a semana, la bajante del Paraná continúa agravándose por el déficit de lluvias hacia el norte de Argentina y en Brasil, y se espera que la situación empeore en el corto plazo”.

Al alcanzar la bajante, durante la última semana,un mínimo de 0,40 metros en el Puerto de Rosario, se estima que el complejo oleaginoso tendrá “un costo asociado de US$ 243 millones en el primer cuatrimestre de 2020, al verse resentida la capacidad de navegación y carga máxima de los buques y barcazas en las terminales portuarias del Gran Rosario, epicentro de la agroindustria argentina”.

En el documento se calcula que US$ 91,2 millones se pierden por el costo que representa para los buques completar su capacidad de carga máxima en otro puerto, o bien a través de otra barcaza pero a distancia del puerto. Los retrasos de los buques, por la falta de caudal de agua, generan una pérdida estimada de US$ 13,7 millones, junto al incremento en los costos de transporte, unos US$ 25,2 millones, y además de costos logísticos extra en la mercadería que baja por barcazas desde Paraguay, Brasil y Bolivia.

Esta situación, genera también una presión bajista al precio del aceite de soja, resultando en una pérdida de U$ 86,4 millones, a lo que se le suman otros US$ 27,4 millones por el retraso en los embarques de maíz, dada la saturación en el almacenaje disponible.

Durante la última semana, la altura del rió  fue de 0,4 metros, el guarismo más bajo desde 1971, y sin antecedentes para abril desde que comienzan los registros en 1884. Además, es muy inferior al mínimo de 2,47 metros que tiene que registrarse a la altura de Rosario para que Hidrovía S.A. tenga la obligación de garantizar los 34 pies de calado.

El Complejo rosarino es el polo exportador más importante del país, y el complejo agroexportador más grande del mundo,abarcando 70 kilómetros de costa. A sus terminales llega la producción cerealera de un vasto hinterland del centro, litoral y noroeste del país. A la actividad cerealera del complejo hay que agregarle además, la actividad en rubros como hidrocarburos y derivados, gas, químicos, petroquímicos y minerales.

Bolsa de Comercio de Rosario / Télam