Por la bajante del Río Paraná ya se recorta la carga de buques
En los comienzos de la cosecha de soja y maíz en Argentina se comenzó a racionar la carga de buques en Rosario, debido a la bajante del Río Paraná.
Por Marcelo Frankel | 06-05-2021 06:30hs
Nuevamente se pone en alerta el sector agroexportador por la bajante del Río Paraná de Argentina, el canal por el que transitan los granos y derivados nacionales al mundo. En los puertos del Gran Rosario empezaron a "recortar" los despachos internacionales justo al comienzo de la temporada de exportación de la Argentina.
La profundidad del Río Paraná en el polo agroexportador de Rosario, el más importante del mundo, contaba con apenas 0,92 metros el martes, según la Prefectura Naval. La fuerte sequía que se experimenta en la República Federativa de Brasil se hace sentir en el caudal del Rio Paraná. Entre 1996 y 2020, la profundidad media del río en Rosario para el mes de abril fue de 3,58 metros.
Según Guillermo Wade, titular de la Cámara de Actividades Portuarias y Marítimas de CAPyM, esto implica un 10 por ciento menos en cada despacho internacional, "estamos cargando entre 5.500 y 7.000 toneladas menos por buque de carga debido a los bajos niveles de agua".
La situación recuerda a la de hace un año, cuando la falta de lluvia hizo que el Paraná llegara a su punto más bajo en 50 años. Argentina es el principal exportador mundial de harina de soja y el tercer proveedor de maíz. El año del comienzo de la pandemia ya se sufrieron enormes complicaciones en el principal canal de exportación y fuente de divisas de la Argentina, por esto los agroexportadores están en alerta.
El Paraná fluye hacia las rutas del Atlántico Sur, por lo que un río profundo hace posible que las mercaderías del agro se carguen en los puertos de Rosario y lleguen a cualquier puerto del globo, evitando el uso costoso de barcazas y el transporte extensivo que atasca el envío de las exportaciones de los “rivales” Brasil y Estados Unidos.
Los meteorólogos dicen que el pronóstico, a corto plazo, es que el río en Rosario baje aún más en los próximos días.
Según detalló a la agencia Reuters, Alfredo Sese, secretario técnico de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), "el costo logístico para la industria podría estar entre $ 250 y $ 300 millones, pero esa es una estimación aproximada. Todo depende de cómo evolucione el nivel del río, pero los pronósticos no son alentadores", justo en el comienzo de la cosecha.
Para esta campaña comercial se esperan 45 millones de toneladas de soja y 50 millones de toneladas de maíz, según la bolsa Rosarina. Hasta ahora, se ha recolectado más del 33% de la cosecha de soja 2020/21 y alrededor del 20% de maíz.
Según Wade, las perspectivas a futuro, al igual que en 2020, no son optimistas porque con la cosecha gruesa en proceso la bajante del río continuará hasta diciembre, cuando recién regresen las lluvias estacionales.
“Este es el cuarto año consecutivo que está lloviendo menos que el promedio. Las lluvias en Brasil son escasas y los dos principales aportes a la cuenca son los ríos Paranaiba y Grande que tienen una carga deficitaria de agua. No se notaron los primeros años pero ya el año pasado cambió la situación. El problema no es mayor porque Hidrovía viene haciendo un muy buen trabajo y tiene las dragas activas”, indicó Wade.
El dragado es una herramienta fundamental para conservar la navegabilidad del río, tarea que desarrolla la empresa belga Jan De Nul, que tiene prorrogada la concesión de la hidrovía por 90 días. "Jan De Nul hizo un gran trabajo el año pasado cuando tuvimos este problema con el río Paraná. Por eso hemos solicitado que el Gobierno extienda la concesión de dragado actual por más de 90 días ", declaró Gustavo Idigoras, director de la Cámara de Empresas Exportadoras CIARA-CEC de Argentina.
"Si no tenemos sus equipos y conocimientos, sería muy difícil para otra empresa garantizar el tránsito por el río", expresó Idigoras.