En respuesta a la decisión del Gobierno Nacional de cerrar las exportaciones para detener los incrementos en el precio de la carne, las entidades nucleadas en la Mesa de Enlace dispusieron un cese de comercialización para todas las categorías de hacienda vacuna desde las 00 de este jueves hasta las 24 del viernes 28.

Daniel Pelegrina, presidente de la Sociedad Rural Argentina calificó al cierre de las exportaciones como una "medida interpestiva y errada" y criticó que representantes del gobierno "no se hayan puesto en contacto con las entidades para dialogar sobre las restricciones a las exportaciones".

El dirigente rural se mostró muy descontento por la medida y aseguró que desde antes de que este Gobierno asuma "le han ofrecido propuestas concretas" y se "mostraron abierto al diálogo" pero, por el contrario, "se han encontrado con una serie de distorsiones hasta llegar al cierre de las exportaciones ".

Para el presidente de SRA, el cierre de las exportaciones actual presenta similitudes con "el camino que se tomó de los años 2006 en adelante". Y, pese a ponerse a disposición para negociar, el dirigente exigió una serie de "soluciones que el Gobierno tiene que aportar a la situación de la salud, la economía, la inflación y el aumento de los combustibles".

La medida del gobierno fue interpretada por Pelegrina como una suerte de "cortina de humo para distraer de otras cosas que están sucediendo" y puso en duda que su aplicación se limite a los 30 días asegurando que desde el sector "no tienen confianza, ni pueden creer que se respeten estos plazos ". A su vez, afirmó en el Canal Rural que es erróneo "seguir con este avance de una política general y de una política agropecuaria que perjudica el país".

Por redes sociales, el dirigente rural agregó que el cierre de las exportaciones "causará un daño irreparable a un sector productivo que ha demostrado que genera empleo y actividad en todo el territorio nacional", a la vez que "destruye la imagen de Argentina como proveedor confiable y deja espacio en el mercado a otros competidores ".

El presidente de Coninagro, Iannizzotto, por su parte, dijo que esta medida "no conduce a nada dentro del desorden de la economía nacional". Achetoni, de la Federacion Agraria Argentina, adelantó que este cierre "no se va a ver reflejado en bajas de precio al consumidor sino que lo va a afectar seriamente generando grandes deserciones del circuito productivo". Por último, Jorge Chemes, de las Confederaciones Rurales Argentinas, condenó la medida y aseguró que es una marcha atrás para el desarrollo y crecimiento de la ganadería ".

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