Las exportaciones de soja sin procesar subieron 50%, mientras que los envíos de harina bajaron 10%
La situación obedece a una caída en los márgenes de ganancia debido a un aumento superior en los precios del poroto que de los subproductos de la oleaginosa, motivado por la pandemia y por la 'guerra comercial' entre las dos superpotencias mundiales.
Por Marcelo Frankel | 14-07-2020 10:00hs
Las exportaciones de poroto de soja entre marzo y junio de 2020 mostraron una suba del 48,33%, al pasar de 2.762.090 toneladas en 2019 a 4.097.099 toneladas en igual período de 2020. Los despachos de harina se redujeron 10% desde un total de 10.754.530 toneladas entre los meses de marzo y junio de 2019 a 9.666.379 toneladas en similar cuatrimestre de 2020, según informaron desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Estas cifras, obedecen a una caída en los márgenes de ganancia de la industria debido a un aumento superior en precios del poroto que de los subproductos de la oleaginosa. Además, influyó una menor demanda de harina por parte de la Unión Europea (UE), en contraposición con un aumento de la demanda china de poroto.
Es por estos motivos es que "se está exportando más poroto que el año pasado y eso es en desmedro de los subproductos”, según explicó a la agencia Télam, Federico Di Yenno, desde la BCR.
Desde la entidad bursatil rosarina, especificaron que "desde principios de abril, momento en el que comienza a generalizarse la cosecha de la soja en zona núcleo, la industria lleva las de perder contra las exportación del poroto sin industrializar. Esta diferencia llegó a un máximo de US$ 10 por tonelada en la última semana".
Según registros de la bolsa rosarina, el precio FOB (valor de la mercadería puesta a bordo de un transporte marítimo) del poroto al 7 de julio era de US$ 359 por tonelada mientras que la harina poseía un FOB de US$ 325,7 la tonelada.
En otras palabras, el poroto de soja está aventajando en precio FOB a la harina en US$ 33,3 y tiene un margen superior en US$ 6 respecto al aceite elaborado vía “crushing” (proceso industrial) que además implica mayores complejidades de elaboración.
Según explicitó Di Yenno a la agencia Télam, gran parte de la harina de soja Argentina va a la Unión Europea, desde donde se espera que haya menores importaciones, “por lo que se va a demorar un poco más la recuperación", del sector.
Por otro lado, que China haya decidido arancelar la compra de soja norteamericana y, en algunos casos directamente no comprarle a Estados Unidos (guerra comercial), generó una distorsión en los mercados que hizo que “China se vuelque a maximizar lo que compra de Sudamérica para tapar el bache de Estados Unidos", detalló el economista jefe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), Agustín Tejeda.
Así, China hace subir el valor de la oleaginosa sudamericana versus la estadounidense, lo que hace que convenga despachar porotos en vez de harina. Entonces, “exportamos más poroto a un mejor precio, pero con el costo de sacrificar “crushing” (producción industrial), porque el margen de molienda cae", detalló el analista.
Además, según el economista, “antes había tres puntos de diferencia (arancelaria) entre lo que pagaba el poroto y la harina y el aceite. Hoy pagan el mismo derecho de exportación”.
Así, la “guerra comercial” entre las dos superpotencias mundiales y la quita de aranceles generaron un mayo despacho de poroto de soja que lo normal, explico el economista.
Te sugerimos leer: El USDA recortó la estimación de áreas sembradas en EEUU
Fuentes: Bolsa de Comercio de Rosario / Télam.