La enfermedad de los cítricos, llamada Huanglongbing (HLB), es transmitida a través de un insecto vector denominado Diaphorina citri y genera, especialmente, en las plantas de de limones, naranja y mandarinas, frutos amargos, incomibles y deformes. Una vez que se la detecta, no queda más remedio que arrancar la planta de raíz y destruirla.

Gracias a un aporte realizado por el fideicomiso Fondagro, administrado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y con el objetivo de controlar al insecto vector, un equipo de entomólogos del INTA de Bella Vista, provincia de Corrientes, trabaja, desde hace más de dos años, en la multiplicación del su enemigo natural, una avispa llamada Tamarixia radiata con el propósito de liberarla masivamente en chacras de productores y en el arbolado urbano de la ciudad. 

Según Alcides Aguirre, referente del laboratorio de Entomología del INTA Bella Vista, Corrientes, a través de la cría y la liberación de estas avispas, se podrá controlar al vector en áreas de traspatio y periurbanas sin el uso de productos químicos. Además, subrayó la importancia de esta acción ya que los programas de prevención no cuentan con medidas para disminuir las poblaciones de Diaphorina citri en zonas urbanas con citrus o mirto.

En las liberaciones de avispas benéficas que se realizaron en otros países, como Brasil, México y los Estados Unidos, se necesitó una alta cantidad de estos insectos de, aproximadamente, unos 400 individuos por hectárea como mínimo, para poder realizar un control eficiente del vector.

Liberaciones de avispas benéficas realizadas en Bella Vista, Corrientes

El equipo del INTA ya llevó a cabo tres liberaciones en diferentes zonas de la ciudad y una en lotes del Proyecto Fontagro, en donde cada una de las sueltas estuvo compuesta por alrededor de 1000 individuos adultos de Tamarixia radiata. En este sentido, Aguirre explicó que gracias a estas primeras liberaciones se podrán ajustar protocolos y evaluar diferentes aspectos, como tiempo de sobrevivencia en los tubos de colecta, duración en el transporte y comportamiento de los refrigerantes, entre otros.

Si bien en la zona citrícola de Bella Vista aún no se detectó la presencia de HLB y los niveles poblacionales del vector no son tan altos como en otras zonas citrícolas del país, Aguirre enfatizó que ¨es una gran oportunidad para implementar estrategias de bajo impacto, disminuir las poblaciones de Diaphorina citri y así impedir el avance rápido del HLB¨.

Pese a que la biofábrica del INTA todavía se encuentra en la fase de ajuste, podrá criar cerca de 500.000 ejemplares de Tamarixia radiata al año, que serán liberados en el casco urbano de la ciudad y también en zonas productoras.

Síntomas del HLB en los cítricos

Fuente: INTA