Como resultado de la pandemia, las agendas políticas y socioeconómicas mundiales debieron reprogramarse para hacer frente a la crisis sanitaria. Entre ellas, la relación de los procesos de cooperación regionales del Mercosur, no fueron la excepción.

En tal sentido, enfocadas en fortalecer el desarrollo y potencial del Mercosur, la Unión Industrial Argentina (UIA), presidida por Miguel Acevedo, junto a la Confederación Nacional de Industria de Brasil (CNI), a cargo de Robson Braga de Andrade, compartieron una videoconferencia en la cual ambas entidades coincidieron en la necesidad de promover acciones conjuntas con miras a la transición hacia la nueva normalidad, según informó la entidad local.

El rol del sector industrial será clave para la generación de empleo, el incremento de la productividad, el fortalecimiento de la competitividad y la reactivación económica regional.

Apuntando hacia el fortalecimiento del rol del Consejo Empresario de ambos países (Cembrar), durante el encuentro que mantuvieron los presidentes de ambas instituciones se analizaron temas referentes a la agenda bilateral tales como: integración productiva, cadenas regionales de valor, la evolución de las negociaciones internacionales en curso, la actualidad del arancel externo común, la importancia de la convergencia regulatoria y las alternativas para la facilitación del comercio regional. Mientras que, el impacto que tuvo y tiene la emergencia sanitaria con respecto a la producción y el empleo en los dos países, fueron analizados en cierre del encuentro.

Voceros de la UIA expresaron a través de un comunicado que en un escenario post pandemia "el rol del sector industrial será clave para la generación de empleo, el incremento de la productividad, el fortalecimiento de la competitividad y la reactivación económica regional".

Según la agenda conjunta programada, el próximo encuentro será en el mes de agosto y contará con la participación de otras entidades industriales del Mercosur.  Los equipos técnicos de las instituciones seguirán trabajando en los temas que se plantearon en esta primera convocatoria.

Uno de los grandes objetivos del Mercosur es cumplir con el gran desafío de seguir reduciendo la pobreza y eliminar la indigencia, para avanzar la disminución de la brecha social existente. Con este doble compromiso y fortalecimiento, se podrán potenciar y proyectar los productos de la región dirigidos a otros mercados del mundo.

Fundado en 1991, por el Tratado de Asunción, bajo el impulso de los presidentes Collor de Mello y Carlos Menem y proyectado con el objetivo de crear un mercado común entre cuatro países (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay), por el Protocolo de Ouro Preto (1994), ha pasado desde entonces por distintas etapas. A pesar de que tal vez no se hayan cumplido todas las expectativas, el Acuerdo tiene un fuerte vínculo con la paz y la cooperación en el Cono Sur de América Latina.

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