Si bien Chile reconoce por ley a los pueblos indígenas, no hay un reconocimiento a ellos en la Constitución. Al menos por ahora. La docente mapuche, Elisa Londón, fue noticia este domingo al haber sido elegida por los miembros de la Convención Constituyente como la presidenta de ese órgano, el cual tendrá la tarea de redactar y aprobar una nueva Constitución. Puede darse por descontado que de aquí a un año, que es el tiempo que tiene para realizar sus trabajos la Convención, Chile tendrá una Carta Magna que reconozca a los pueblos indígenas.

Aunque es menos novedad -de hecho Chile tuvo una presidenta de la República, Michelle Bachelet, electa en dos oportunidades- también es importante el hecho de que sea una mujer quien presida la Convención. Londón, en tanto mujer e indígena, marca un fuerte contraste con la dirigencia chilena conservadora, representada actualmente por el presidente Sebastián Piñera. Piñera tiene actualmente un 12% de aprobación, según la encuesta de junio del instituto Cadem, y ha realizado a fines del mes pasado un cambio de gabinete, buscando mejorar la imagen de su gobierno ante la ciudadanía y también contener a los propios aliados que muestran insatisfacción con su liderazgo. Habiendo habido varios cambios en el gabinete debido a las sucesivas crisis que afectan su gestión desde las masivas manifestaciones de 2019, hoy hay 17 ministros varones, que ocupan las carteras más relevantes y 7 mujeres.

Otro de los aspectos que muestran los cambios que está viviendo Chile, es el hecho de que Loncón resultó electa presidenta de la Convención al ganarle en segunda vuelta a otra mujer indígena, la colla Isabel Godoy. Uno de los motivos por los cuales Loncón fue preferida a Godoy fue que es identificada como más hacia la centro izquierda, y no tan izquierda, que Godoy. Es decir, la elección fue entre dos alternativas fuera de los común para la política chilena. El resultado de las elecciones del 15 y 16 de mayo, cuando se eligieron los miembros de la Convención, alteró la correlación de fuerzas, al menos por ahora y en lo que concierne a la redacción de la nueva Constitución, ni más ni menos.

Loncón ganó su lugar en la Convención por medio de los escaños reservados a integrantes de los pueblos indígenas. Por consiguiente, forma parte del 31% de los miembros electos sin pertenecer a ningún partido político, otro de los fenómenos que dejó la elección constituyente: la constatación de la desconfianza hacia los partidos políticos, que ya había sido puesto de manifiesto en el plebiscito de fines de 2020, cuando el 87% de los votantes se inclinó por la elección de una Asamblea Constituyente para redactar la Carta Magna, dándole la espalda a la propuesta de un cuerpo parlamentario creado por los legisladores que ya estaban en funciones.

Mujer, indígena y sin pertenencia partidaria, Elisa Londón simboliza los cambios que se están dando en la política chilena.

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