La decisión del Gobierno Nacional de suspender por 30 días las exportaciones de carne, para limitar la subas de precios de la carne en el mercado interno, trajo aparejado una multiplicidad de opiniones encontradas en relación a la medida. La Asociación de Propietarios de Carnicerías, conducida por Alberto Williams, celebró la disposición junto con referentes de organizaciones sociales, economistas y políticos que también se manifestaron a favor de la restricción a las exportaciones.

La decisión, de acuerdo a Alberto Williams, servirá como un punto de partida para "organizar el mercado que se disparó", por lo que se trata de algo positivo que facilitará que "la carne vuelva a estar el alcance del consumidor argentino". Lo anunciado el lunes, según el referente de las carnicerías, es una medida "en defensa del consumidor".

En esta misma línea, la Diputada del Frente de Todos Fernanda Vallejos evaluó a la intervención del Estado en las exportaciones como algo necesario "para garantizar el acceso a los alimentos a todos los miembros de la comunidad" y de esta manera cumplir con el derecho humano básico de la alimentación.

La medida permite un "desacople de los precios internos de los externos", de acuerdo a la legisladora, que de complementarse con estímulos para la producción permitirán "satisfacer el abastecimiento interno en un nivel no inferior a los 50 kg percápita anual".

Por su parte, el director del Centro de Economía Política (CEPA), Hernán Letcher, también respaldo la restricción a las exportaciones ya que "habilita la negociación con el sector". El economista explicó que la interrelación entre las exportaciones y el precio interno de la carne se debe a tres factores: los precios internacionales, el precio de las commodities y la "remarcación que hacen algunos jugadores en la cadena de producción y comercialización ".

Otro economista, Sergio Chouza, de la Universidad de Avellaneda destacó que la medida es sólo un puntapié para una discusión que se comenzará a dar ahora, ya que pone el tema en la agenda,"ordena prioridades y da una señal muy firme de que al Gobierno no le da igual que los argentinos y las argentinas se alimenten bien".

"Frenamos una situación que estaba desnaturalizada y desmadrada en la que cada vez se incorporaban más exportadores en el mercado y ni siquiera el rol Mercado de Liniers como ordenador del precio interno estaba funcionando" dijo Chouza y  agregó que "poner un coto sobre esta situación" facilita que se "piensen alternativas no sólo para el corto plazo sino para que los precios se empiecen a moderar y se elaboren estrategias para mejorar la producción".

Desde el sector político, la agrupación la Cámpora se pronunció tácitamente a favor del tema al publicar un video del 2006 donde el expresidente Néstor Kirchner respalda las restricciones de las exportaciones.

El presidente Alberto Fernández, atento a las controversias que planteó la decisión de restringir las exportaciones por 30 días, aseguró en una entrevista radial que el valor de la carne "se desmadró claramente luego de la apertura comercial durante el gobierno anterior y la exportación a China". Suspender las por 30 días, es clave para "volver a poner el precio en sintonía con el poder de compra de un argentino " dijo Fernández y agregó que "no se puede seguir viendo como el precio de  carne crece sin ningún justificativo ".

Augusto Costa, ministro de la Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la Provincia de Buenos Aires destacó que los bajos niveles de consumo de carne responden a una situación del mercado en el que "se privilegió la rentabilidad de algunos de los segmentos del sector, sobre todos los más concentrados y generó precios que impiden el acceso de muchas familias a bienes esenciales".

El ex juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni consideró la postura de la Mesa de Enlace como "absolutamente mezquina y anti nacional" y afirmó que "especialmente en una situación de emergencia por la pandemia, todos los sectores deberían ceder un poco ".

Desde el lado de las organizaciones sociales la medida también fue apoyada. El secretario general de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Esteban Castro, reconoció que realmente "está muy difícil en los barrios populares seguir soportando los aumentos de los precios de la carne y otros alimentos, que se hacen inalcanzables para la familias trabajadoras y para los sectores más humildes " y destacó que el sector exportador opone ya que "sólo les interesan sus ganancias ".

En el mismo tono, el secretario general del Movimiento Octubres, Gastón Harispe respaldo la decisión oficial de cerrar las exportaciones y aseguró que "la oligarquía argentina, expresada en sus distintas organizaciones, vuelve a apostar a frenar el progreso, el desarrollo de la economía argentina y del mercado interno y lo hacen a costa de falta de alimentos para millones de argentinos".

Por último el dirigente social Juan Grabois también se manifestó a favor y destacó que se trata de una medida " de sentido común para contener el aumento de precios " y agregó que "la ausencia de carne en el mercado local" es consecuencia de "la falta de compromiso de los sectores económicos que la comercializan y prefieren a las clases medias emergentes que quieren comer carne y tienen dólares".

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