La Comisión Europea (CE) presentó la semana pasada el Plan de Acción para el desarrollo de la producción ecológica. Con el objetivo de impulsar la producción y el consumo de productos orgánicos y sustentables fijó que, para el año 2030, el 25 % de las tierras agrícolas deberán estar dedicadas a la agricultura ecológica.

Según informaron en un comunicado, "el Plan de Acción está pensado para aportar al sector de la agricultura ecológica, que ya está experimentando un rápido crecimiento, las herramientas adecuadas para alcanzar el objetivo del 25%". El documento propone a través de 3 ejes y 23 acciones: impulsar el consumo, aumentar la producción y seguir mejorando la sostenibilidad del sector para "velar por su crecimiento equilibrado".

Si bien el proyecto fue bien recibido por el Comité de Organizaciones Profesionales Agrícolas (COPA) y la Confederación General de Cooperativas Agrícolas (Cogeca), advierten que el objetivo final “es muy ambicioso de alcanzar en menos de nueve años”. Los productores apuntan que, si bien la agricultura ecológica “no ha dejado de crecer en la última década” y pasó de 8,5 millones de hectáreas en 2010 a 13,8 millones en 2019; la superficie dedicada exclusivamente a este tipo de agricultura en la UE representa un 8,5%, lejos aún objetivo del 25% que fija la estrategia.

A favor del plan, las entidades que agrupan a los referentes de la agricultura observaron que durante 2020 el consumo de productos ecológicos aumentó y ven en este tipo de producción una posibilidad de aumentar su rentabilidad. En esta línea, los agricultores indican que para adoptar el modelo de producción orgánica es necesario “un planteamiento guiado por el mercado, ya que es la mejor forma de garantizar un crecimiento sano para este sector”. Desde COPA-Cogeca manifiestan que de esa forma es posible no solo consolidar  dicho mercado, sino también “salvaguardar las inversiones necesarias y asegurar que los agricultores reciben una porción justa de cada euro que gasta el consumidor”.

Janusz Wojciechowski, comisario de Agricultura de la Comisión, declaró que "el sector de la agricultura ecológica merece reconocimiento por sus prácticas sostenibles y su uso de recursos, lo que le otorga un papel central en la consecución de los objetivos del Pacto Verde”. En torno a esta idea, el Plan promoverá el consumo de este tipo de productos y entre sus acciones contempla: “Informar y comunicar sobre la producción ecológica, estimular un mayor uso de la agricultura ecológica en los comedores públicos a través de la contratación pública y aumentar la distribución de productos ecológicos en el marco del programa escolar de la UE”.

Al respecto Lone Andersen, presidenta del grupo de trabajo Agricultura Ecológica del COPA-Cogeca, admitió que “el enfoque planteado por la Comisión Europea es el más sostenible” y agregó que desde el sector están “más que dispuestos a cooperar estrechamente con la Comisión, el Consejo y el Parlamento europeos, así como con las partes interesadas del sector, para acercarnos todo lo posible a este objetivo sin grandes perturbaciones de mercado”.

Sin embargo, los productores y cooperativistas declaran que, para poder avanzar hacia esta transición a la que destacan como un refuerzo del vínculo con el medio ambiente y la biodiversidad; resultan necesarias nuevas políticas y marcos normativos, además de investigación e innovación, que posibiliten a los agricultores un abanico de herramientas apropiadas para cosechar productos de calidad y saludables. También destacan la importancia de “vigilar de manera todavía más minuciosa la propagación de enfermedades y malas hierbas”.

Esta nueva iniciativa de la UE, destinada a restablecer el equilibrio de nuestra relación con la naturaleza, avanza unos cuantos casilleros más en cuanto a la producción sustentable, el menor uso de agroquímicos y la seguridad alimentaria. Significará para los productores locales hacer frente a mayores desafíos, evolucionando hacia un nuevo modelo de agricultura.

Ahora bien, el Plan también implicará en un mediano plazo mayores exigencias y presiones a todos los actores del mundo agropecuario y sus negocios, ya que de otra forma pondría en desventaja a los productores europeos. ¿Cómo se reconfigurará la producción en la búsqueda de garantías para un resultado más equilibrado entre todas sus partes?

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