En un comunicado de prensa dado a conocer este sábado 28 de agosto, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, a cargo del canciller Felipe Solá, da cuenta de haber tomado conocimiento de una medida del Gobierno de Chile publicada en el día de ayer y fechada el pasado 23 de agosto en el Diario Oficial de ese país, relativa a espacios marítimos.

Afirma nuestra Cancillería que Chile “pretende proyectar la plataforma continental al Este del meridiano 67º 16´ 0este, lo cual claramente no condice con el Tratado de Paz y Amistad celebrado entre ambos países en 1984”.

El 21 de abril de 2009, la República Argentina hizo una presentación completa ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental (CLPC) de las Naciones Unidas, el cual incluyó el límite exterior de la plataforma continental de todo el territorio argentino: continental, islas del Atlántico Sur y el Sector Antártico Argentino, formado por 6336 puntos de coordenadas.

El límite exterior de la plataforma continental argentina en esta zona se refleja en la Ley Nacional 27.557, aprobada el 4 de agosto de 2020 por unanimidad en ambas Cámaras del Congreso de la Nación y promulgada por el Poder Ejecutivo el 24 de agosto de ese mismo año.

Explica nuestra Cancillería que esa ley refleja en una norma interna la mencionada presentación oportunamente efectuada por el Gobierno argentino sobre dicha zona ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental (CLPC) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Al respecto, destaca el documento que “esa presentación se ajusta en todo al Tratado de Paz y Amistad y fue aprobada sin cuestionamientos por dicha Comisión con los efectos de establecer un límite marítimo definitivo y obligatorio de conformidad con la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR)” y subraya que “Ni la presentación ni la decisión de la Comisión fueron objetadas por Chile”.

Por eso, el Ministerio encabezado por el Ing. Felipe Solá sostiene que la plataforma continental argentina, que aprobó por unanimidad el Congreso Nacional, es la que definió oportunamente la ONU.

Finalmente, la Cancillería Argentina denuncia las intenciones del gobierno de Sebastían Piñera y hace un sereno llamado a revertir la provocación: “La medida intentada por Chile pretende apropiarse de una parte de la plataforma continental argentina y de una extensa área de los fondos marinos y oceánicos, espacio marítimo que forma parte del Patrimonio Común de la Humanidad de conformidad con la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar. Consecuentemente, la citada pretensión chilena no es aceptable para la República Argentina y plantea una situación que corresponderá resolver a través del diálogo en defensa de los derechos argentinos; de acuerdo a la histórica hermandad de nuestros pueblos y el derecho internacional”.

Una nueva disrupción en el proceso de diálogo argentino-chileno, jalonado de desencuentros a lo largo de toda nuestra historia. Esperemos que, como afirma nuestra Cancillería, prevalezcan en esta instancia los valores de la hermandad de nuestros pueblos y del respeto por el derecho internacional