El Embajador de Argentina en Brasil, Daniel Scioli, mostró preocupación y rechazo por la reciente firma del Decreto 10.557 por Jair Bolsonaro, el ministro de Economía, Paulo Guedes y la ministra de Agricultura, Tereza Cristina Dias.

La normativa establece una cuota mínima fija de importación de 750 mil toneladas de trigo con un arancel del 0% para países por fuera del Mercosur, pero con el mismo beneficio arancelario que para el bloque. Todos los años Brasil renueva el cupo de cuota de importación de trigo con carácter excepcional, pero en esta oportunidad la nueva normativa prevé una cuota permanente.

Este cambio plantea principalmente una controversia respecto a la política comercial regional. La decisión unilateral del Estado brasilero impacta sobre los acuerdo del Mercosur. Cabe destacar que el gobierno de Jair Bolsonaro en diferentes oportunidades se pronunció en contra del Mercado Común del Sur, e incluso amenazó con romper el bloque.

En la práctica, Argentina es el principal proveedor de trigo para Brasil, considerando que el país vecino importó en 2019 más de 7 millones de toneladas, 750 mil es un porcentaje muy acotado. No obstante podría afectar el comercio regional al igualar los beneficios del acuerdo Mercosur con otros países por fuera del mismo, abriendo la competencia pero, fundamentalmente, contradiciendo la razón de ser del acuerdo regional que busca la integración y colaboración de los países de América del Sur.

Al respecto, Scioli manifestó en su cuenta de Twitter: "Esta medida, que hasta 2020 era de carácter excepcional, afecta severamente al Mercosur".

Expreso mi profunda preocupación y rechazo por el Decreto 10.557 de la República de Brasil.

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