Se estabilizó la bajante, pero el escenario sigue siendo crítico
El río Paraná registra la peor bajante desde 1944. En este contexto, la Bolsa de Cereales de Entre Ríos organizó un seminario virtual en el que expusieron expusieron el Ing. Juan Borús, subgerente de sistemas de información y alerta hidrológico del Instituto Nacional del Agua (INA) y Guillermo García, vicepresidente 1º de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).
Por Cecilia Fuertes | 25-08-2021 09:00hs
El río Paraná registra la peor bajante desde 1944, y aunque se estabilizó, la perspectiva es realmente negativa.
En este contexto, la semana pasada, la Bolsa de Cereales de Entre Ríos organizó un seminario virtual titulado “Desafíos a la Comunicación en Plena Emergencia Hídrica”. En el mismo expusieron el Ing. Juan Borús, subgerente de sistemas de información y alerta hidrológico del Instituto Nacional del Agua (INA) y Guillermo García, vicepresidente 1º de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).
El Ing. Juan Borús comenzó su exposición hablando sobre el nivel de los ríos, mostró en gráficas históricas lo lejos que está el nivel del río de los promedios y sostuvo que “la perspectiva es realmente negativa”.
Ante esta situación, desde el Instituto se establecieron tres escenarios alternativos para el comportamiento de la actual bajante del río Paraná. El objetivo de estos escenarios es servir de base para delinear posibles acciones en los sectores de mayor impacto de la bajante del río Paraná.
El primer escenario que plantearon es que continúe progresivamente la tendencia de bajante que, a corto plazo, es el más probable de ocurrir. El siguiente escenario, y más crítico que el anterior, plantea una situación intermedia, la cual, a mediano plazo, resultaría ser la más probable de ocurrir de acuerdo a la situación de las cuencas superiores de aporte y del estado de los embalses de aguas arriba. Y, por último, el tercer escenario posible es el más crítico y similar a lo registrado en el año 1944 (bajante más severa registrada), en donde se presupone lluvias débiles en el inicio del verano 2021/22.
El comportamiento del río se ha alejado temporalmente de aquello ocurrido en el año 1944, bajante más severa registrada.
Sin embargo, y en relación al tercer escenario planteado, el especialista del INA explicó que, “en las últimas semanas se ha producido desde territorio brasileño el aporte de caudales superiores a los originalmente previstos dando como resultado la estabilización de los niveles de la bajante en prácticamente todo el tramo argentino del río Paraná. En consecuencia, el comportamiento del río se ha alejado temporalmente de aquello ocurrido en el año 1944, bajante más severa registrada”.
Las consecuencias de la bajante
Para explicar las implicancias de la bajante en el rio Paraná, hizo uso de la palabra Guillermo García. En su exposición explicó que “aproximadamente, cada reducción de un pie de calado implica cargar 2.500 TM menos en un Panamax, y entre 1.500 y 1.800 TM en un Handysize o Handymax”.
Ante este escenario, y en vistas que no va a modificarse demasiado en lo que queda del 2021 y quizás mejore un poco la situación para el 2022, García sostuvo que es necesario “maximizar la eficiencia del calado de los canales por lo que se torna crítica la etapa de transición de AGP desde el 14 de septiembre de 2021. El sistema requerirá del concesionario un mantenimiento constante de manera de no generar mayores obstáculos a la principal vía de exportación económica de Argentina”.
Debido a que el costo logístico es una de las variables que afecta la competitividad de los productos exportados por nuestro país, el vicepresidente primero del CIARA-CEC hizo especial énfasis en la necesidad de “contar con una administración del manejo de la Hidrovía que reduzca los costos y garantice los pagos puntuales por servicio y un manejo ecológicamente sostenido, ya que esto redundara finalmente en mayores precios para nuestros productores y mayor trabajo argentino”.