Simón Reina tiene apenas 15 años. Una noche convulsionó y se desató un operativo sanitario que concluyó con la cirugía en el Dubarry. Junto a su madre hablaron con Protagonistas y ponderaron la importancia de la salud pública. Hoy se recupera de manera formidable en su Roque Pérez natal.

Pocos días habían pasado de semejante intervención quirúrgica. Todo pasó demasiado rápido. Simón Reina tiene 15 años, ama el fútbol, los amigos, su madre y a sus hermanas. Es fanático de River y su vida transcurría como la de otros tantos jóvenes adolescentes. Pero una noche el cielo se puso muy oscuro. Convulsionó y debió ser trasladado de urgencia a un centro de salud.

Allí comenzó una pesadilla que va teniendo un final feliz. Protagonistas pudo realizar una entrevista vía zoom con Daniela su mamá y el propio Simón que muestra una notable recuperación. “Todo fue más rápido de lo que esperaba”, dice el joven. “Los médicos me daban mucha seguridad y transmitían mucha seguridad… obvio que se te viene muchas cosas a la cabeza, pero me aseguraban que todo iba a salir bien”, dice Daniela. En un mes la vida de esta familia cambió radicalmente.

Tras las primeras convulsiones que acontecieron a las 6 de la mañana de un miércoles, Simón fue a emergencias del hospital roqueperense. No tenía antecedentes de problemas de salud. Pocas horas después tuvo un nuevo episodio. La Dra. Lorena Thea pidió una tomografía y detectó una mancha que disparó un operativo sanitario.

Consiguieron un turno para una resonancia el jueves 7 de diciembre que se hizo en Esteban Echeverría. Ese mismo día, cuando ya habían regresado a Roque Pérez les avisan que en Mercedes, más precisamente en el hospital Provincial Blas Dubarry, los estaban esperando.

Lo recibió el Dr. Sebastián Nicolao quien los orientó sobre lo que podría llegar a ser. “Ese jueves se me vino todo el mundo abajo… cuando uno escucha palabras como cáncer, tumor, metástasis, producen miedo. Nunca me había pasado algo tan cercano con uno de mis hijos. Tuve mucho miedo”, agrega la mamá.

“Yo siempre fui muy sano, fue todo muy rápido e inesperado. Me desperté en el Hospital y no sabía lo que estaba pasando. Un proceso muy duro y muy rápido. Yo estaba lúcido como si no me hubiese pasado nada, pero eso no entendía lo que estaba pasando”, agrega Simón.

La cirugía tuvo una duración de más de cuatro horas, tiempo que para los familiares del joven se hizo eterno. “Dentro de todo estábamos tranquilos. Cuando salió el Dr. Marelli con el resto de los profesionales nos dijeron que Simón era un campeón. Fue como sacarme una mochila que pesaba 300 kilos”, manifiesta Daniela Leguizamón.

Simón recuerda que charló con los médicos antes de la intervención, le pusieron música de Soda Stereo cuando lo anestesiaban y se sintió siempre seguro. “Yo hablé con todos los médicos y siempre me transmitieron seguridad. Mucha tranquilidad. Son profesionales espectaculares”, asegura. Su recuperación sorprende. “Personalmente esperaba quedarme dos o tres semanas en el Hospital después de la operación, hasta los médicos se sorprenden de lo rápido que voy evolucionando”, agrega.

Salud Pública

Decíamos otra vez la salud pública. Daniela y Simón reconocen que una intervención de esta naturaleza hubiese sido imposible de afrontar en la salud privada.

Daniela trabaja en el sector gastronómico, “somos trabajadores, el tema salud es muy caro… no hubiésemos podido solventar los gastos que lleva una operación de este tipo. Pero gracias a Dios existe la salud pública y existe Juan Marelli y su equipo que hicieron todo por Simón y por nosotros. Simón nació otra vez. Por eso estamos muy agradecidos con todo el Hospital, la atención y el cariño que nos brindaron”, destaca su mamá.

Simón comienza una nueva vida, “te cambia la forma de pensar. Siendo joven hay cosas que uno no piensa. Ahora voy a tratar de disfrutar más de la vida… Se te cruzan muchas cosas. Primero que nada pensé de la que me salvé. Y si ahora sueño con algo es poder ver a mi jugador favorito que es Julián Álvarez… me encantaría conocerlo”, reflexiona repleto de fortaleza.

Poco antes del zoom los jugadores del plantel de River, Nacho Fernández, Pity Martínez y Milton Casco, le mandaron un video en el que le desearon una pronta recuperación.

Daniela protegió toda la vida a Simón, pero cuando entró al quirófano supo que lo que estaba sucediendo ya no estaba en sus manos sino en las de un grupo de profesionales que siguen demostrando su enorme desempeño.

Todo salió bien y el ejemplo de Simón y la exitosa operación, resultó inspirador para tantísimas personas porque invitan a valorar cada minuto que nos regala la vida.

Mirá el reportaje completo realizado por Walter Anido