Responsables del laboratorio chino Sinopharm, coinciden con autoridades de Pfizer, a la hora de afirmar que se necesita un refuerzo para hacerle frente al coronavirus. El país oriental ya puso los motores en marcha para cumplir con esta iniciativa, mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud, por el momento, desacredita esta idea.

La Organización Mundial de la Salud recientemente emitió un comunicado donde expresó que aún no hay evidencia científica que respalde el hecho de que la población requiera de una tercera dosis como refuerzo para hacerle frente a la COVID-19. Desde el organismo alientan a que todos los países completen su esquema de vacunación antes de pensar una tercera ronda.

Por su parte, autoridades del laboratorio estadounidense Pfizer, marca que se está utilizando en algunas naciones como refuerzo, reconocieron que la eficacia de sus vacunas disminuyen con el tiempo, por lo tanto, una tercera dosis sería conveniente para aumentar el número de anticuerpos.

Quienes coinciden con esta teoría son los dueños del laboratorio chino Sinopharm, que dieron a conocer que ya comenzó la etapa de ensayos clínicos para aplicar un refuerzo. Además, se encuentran trabajando en el desarrollo de  una nueva versión de su vacuna que protege a la sociedad de nuevas variantes, tales como Delta y Beta. “La primera opción en el futuro debería ser recibir una vacuna de refuerzo para la mayoría de las personas", destacó en un comunicado, Zhang Yuntao, vicepresidente de la entidad.

Si bien estos avances están vigentes, desde el laboratorio aclararon que aún todo se encuentra en etapa de ensayo, y tal como remarcó Zhang, para ser distribuidas para uso de emergencia o general, primero deben completar las pruebas de seguridad y eficacia. Sin una fecha estipulada para que esto suceda, el responsable de Sinopharm dejó en claro que tanto la tercera dosis como la nueva vacuna, podrían ofrecerse una vez que las campañas de vacunación avancen en todos los países, tal como solicitó la OMS.

Sinopharm y Argentina

La vacuna China es una de la más utilizada en nuestro país y ya se cuenta con un total de 17.928.000 dosis recibidas desde que iniciaron las negociaciones con el país oriental. Además, en el transcurso de esta semana arribarán 3.248.00 nuevas dosis, distribuidas en tres vuelos.

Actualmente, Nación firmó un acuerdo con el laboratorio chino por 24 millones de vacunas. Julio y agosto fueron claves para dar inicio a este cronograma, mientras que septiembre se ubica como último mes para finalizarlo. Hasta el momento todo se cumple en tiempo y forma.

Las tratativas con China no fueron fáciles en un comienzo y fue el propio presidente, Alberto Fernández, quien reconoció que existieron una serie de idas y vueltas -razonables en la discusión- cuando se comenzó a negociar con el país oriental. El problema puntual fue el precio económico de cada componente y, finalmente, luego de varias charlas entre los presidentes de ambas naciones, se pudo acordar que del precio original de $30 dólares por dosis, se bajara a $20.

Este episodio no fue el único que puso en tensión a las autoridades sanitarias de nuestro país. En un momento, China decidió priorizar inmunizar solo a su población, pero un nuevo diálogo entre Fernández  y su par chino Xi Jinping habilitó el envío de dosis destinadas a aquellas personas que ya habían recibido la primera. De todas formas, la interrupción de las partidas no frenó el escalamiento de la producción a través de nuevas plantas de Sinopharm, lo que permitió la posibilidad de una nueva negociación, contando así con la llegada de más vacunas.

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