El jueves en Chicago fue una jornada con cierre mixto para los principales cultivos negociados en el recinto norteamericano.

Así, el contrato de soja de julio cedió 1,18% (US$ 6,80) hasta llegar a los US$ 567,32 por tonelada, mientras que la posición agosto recortó un 0,85% (US$ 4,78) para cerrar la rueda de negocios a US$ 554,83 la tonelada.

La cartera agrícola norteamericana (USDA) recortó sorpresivamente sus proyecciones para el uso industrial del cereal. Esta situación generaría mayores stocks del grano a los proyectados para el final de campaña, dando fundamento a las bajas en los contratos más cortos de la soja, negociados en el mercado de Chicago.

Más allá de la rebaja registrada en las posiciones de corto vencimiento, el punto a tener en cuenta es que las "posiciones más lejanas registraron subas, apuntalados por el clima cálido y seco que afecta a las regiones del medio-oeste norteamericano", remarcaron desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

Los subproductos de la oleaginosa acompañaron la tendencia negativa del poroto, con un recorte del aceite de soja en su posición  julio del 1,57% (US$ 24,91) hasta llegar a los US$ 1.553,35 por tonelada, mientras que la harina de soja bajó 1,24% (US$ 5,29) para cerrar el día de negocios en US$ 420,63 la tonelada.

En el caso de los granos amarillos, los contratos de maíz registraron un incremento del 1,19% (US$ 3,25) hasta llegar a los US$ 275,18 en el contrato de julio, impulsados por el hecho de que "el USDA incrementó sus proyecciones para la demanda producto de mayores exportaciones estimadas y un aumento en el uso del cereal para la producción de etanol", detallaron desde la bolsa rosarina.

Finalmente, los contratos de trigo en su posición más corta ganó 0,21% (US$ 0,55) y cerró la rueda de negocios en US$ 251,24 por tonelada, tras la noticia de que las proyecciones del USDA se encontraran en sintonía con lo esperado por los operadores. Las posiciones más largas ajustaron a la baja