UATRE contra el flagelo del trabajo en negro y la precariedad laboral
Se detectaron trabajadores en condiciones de vivienda muy precarias, sin ropa de trabajo adecuada y sin los elementos de seguridad e higiene esenciales para prevenir el Covid-19 y realizar la actividad de desflore de maíz.
Por Camila Correa | 17-01-2021 10:49hs
Con el firme compromiso por la defensa de los derechos laborales de los trabajadores rurales y el bienestar de su familia, a través de un trabajo en conjunto, la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), y el Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (RENATRE), sumado al personal del Ministerio de Trabajo de la Nación, detectaron graves irregularidades en establecimientos rurales de la provincia de Santa Fe.
Cabe mencionar que José Voytenco, representante de los trabajadores rurales y recientemente electo presidente del RENATRE, expresó días atrás, durante su asunción: “Asumo este compromiso de presidir el RENATRE con orgullo y una gran responsabilidad, no sólo con el Registro y sus trabajadores, sino con todos los trabajadores rurales y empleadores del país. Tenemos el objetivo para los próximos 4 años de al menos duplicar la cantidad de trabajadores registrados y para eso necesitamos buenas políticas para el sector y una gran campaña nacional de fiscalización”.
En línea con esta premisa y para romper con este dilema del trabajo no registrado, la delegación Regional de UATRE de Venado Tuerto, provincia de Santa Fe, encabezó este jueves el operativo de inspecciones junto a personal del Ministerio de Trabajo de la Nación y RENATRE en las zonas de Hughes.
En esta oportunidad, Juan Flaherty, delegado regional de UATRE y Elian Peger, subdelegado, visitaron los establecimientos agropecuarios junto a inspectores del ministerio, donde detectaron irregularidades en establecimientos dedicados al desflore de maíz.
El desflore de maíz es una de las principales actividades que efectúan los obreros rurales santiagueños. Carentes de fuentes de empleo en su provincia de origen, se ven obligados a migrar a otras zonas del país para proveerse un ingreso. El desflorado consiste en quitarle la flor a la planta de maíz, con el objeto de evitar que la misma se contamine. Se realiza antes de la cosecha, entre los meses de octubre y marzo y hasta ahora requiere gran cantidad de mano de obra.
Flaherty, en dialogó con El Agrario mencionó sobre las condiciones en que se encontraron a los trabajadores vinculados a esta actividad “se hallaron 19 trabajadores provenientes de la provincia de Santiago del Estero en condiciones de vivienda muy precarias, les faltaba ropa de trabajo adecuada y los elementos de seguridad e higiene esenciales para prevenir el Covid-19 y realizar la actividad”, precisó y agregó: “No se pueden creer las condiciones de vida deplorable a la que se ven sometidos los compañeros”.
Asimismo, contó sobre la manera de proceder junto al Ministerio de Trabajo de la Nación: "Hicimos las denuncias correspondientes al ministerio para que se regularice la situación, revisen los recibos de sueldos de los compañeros y que de esta manera se compruebe que los salarios sean los correspondientes”.
Por último, el delegado regional recordó que durante el 2020 se efectuaron aproximadamente 40 inspecciones en establecimientos rurales, siendo la de la localidad de Rufino una de las más importantes, donde rescataron a un trabajador rural víctima de trata de persona con fines de explotación laboral en un tambo de dicha localidad.
“Lamentablemente, seguimos detectando precariedades laborales que apenan, pero nuestro objetivo es claro, es colaborar con la lucha contra la explotación laboral, el trabajo infantil y el trabajo precarizado”, concluyó el delegado.
Cabe mencionar que José Voytenco, en distintas declaraciones mediáticas, ha remarcado la lucha que vienen teniendo “contra el trabajo no registrado”, y ha brindado detalles sobre la situación de informalidad que atraviesa el sector, "con más de 500 mil trabajadores en negro".
Asimismo, ya en funciones como presidente del RENATRE, explicó la manera de trabajo que pretende: “Hay que darle vida y mayor contención a los trabajadores. La parte de fiscalización e inspección tiene que ser manejada por el bloque obrero, porque quién se va a inspeccionar a sí mismo. Las inspecciones las tenemos que hacer nosotros, no los empleadores”.
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