No es aconsejable el consumo de hongos silvestres si no se tiene una vasta experiencia en la selección de variedades comestibles. Por eso la mejor garantía de un consumo seguro nos la da nuestro verdulero de confianza, porque pertenece a una red experimentada de producción y distribución que nos certifica el libre consumo.

La gastronomía variada que tenemos en la Argentina nos permite utilizar los hongos en guisos, ensaladas o risottos, pero también pueden formar parte de diversos tipos salsas que jerarquizan nuestras pastas, o bien a la plancha o la parrilla asados con otras verduras.

Los hongos Portobello, los Champiñones y las Gírgolas son las especies que más están presentes en la mesa de los argentinos.

Muchos nos preguntamos si son pocos los tipos de hongos en el mundo, y la verdad es que impacta saber que hay 38.000 tipos distintos y entre ellos una cantidad importante que son venenosos, que en un 100% son silvestres.

Los hongos nos aportan un complemento en nuestra nutrición, tienen proteínas, vitaminas, minerales y fibra y siempre con bajo nivel calórico. Por estos motivos se han propagado los cultivos de hongos en invernaderos o a campo abierto, que nos permiten tener este producto a disposición de la cocina todo el año.

TIPOS DE HONGOS COMESTIBLES EN ARGENTINA

Champiñones, también llamados hongos París, se cosechan todo el año, pero su principal temporada de producción es el otoño. Son blancos, delicados, que se pueden comer desde crudos, pasando por la cocción o en conservas. Siempre se recomienda limpiarlos a seco y no mojarlos antes de consumir o cocinar.

Portobellos, son extraordinarios en su origen geográficos que es la costa del Mediterráneo. Son de un tamaño mayor que los París, los que saben dicen que salteados con ajo y aceite de oliva son un manjar.

Gírgolas, son salvajes y muy buscados, tienen un sombrero característico, de color gris o pardo, que cuando maduran pasan a ser de color amarillo y luego rosado, de aroma fuerte y suave sabor.

En China los más populares son los hongos Shiitakes,en realidad ampliamente utilizados en toda Asia, de sombrero marrón oscuro y con un interior cremoso. Tienen aroma fuerte a madera y se usan en sopas, guisos, en ensaladas y en el sushi.

Los más vistosos son los Morillas, los cuales tienen color dorado marrón con sombrero alargado y consistencia esponjosa, también llamados Ciprés, con una imagen de panal de abejas. Son especiales para consumir deshidratados.

Los últimos tres destacados son los Porcinis, popularmente conocidos en Italia y resto de Europa, son muy usados en su fase de secos y como auxiliares en la gastronomía mediterránea todo el año.

Los otros son los Enokis, de origen japonés, pueden ser cultivados, de color blanco, o salvajes, de color marrón oscuro. Son especiales para utilizar en el universo de la cocina con wok, por su sabor dulzón.

Finalmente los más caros, los más buscados, de los cuales ya hemos hablado en anteriores artículos, las Trufas, tanto blancas como negras se producen en Francia, Italia y España, pero en Argentina estamos despertando a esta producción con gran rentabilidad.