Lo poco que se sabe de Santos Vega es que fue un gaucho argentino del cual no hay casi datos y que pudo dar origen a una leyenda basada en el duelo con Juan Gualberto Godoy a quien venció en una payada allá por 1824. Quizá haya existido realmente y después se convirtió en un mito.

A Santos Vega lo llamaban “el payador invencible”, aquel de larga fama.  La historia cuenta que tuvo una cruenta lucha con el Diablo o mandinga.

La tradición oral se va tejiendo en los pueblos del interior y a veces va cambiando parte de la historia según el narrador; por eso una de ellas cuenta que Santos Vega habría payado en más de una oportunidad con un negro en lo que hoy  es la calle Montevideo entre Sarmiento y Corrientes,  en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Las tradiciones comienzan a contarse con la verdad, después van sufriendo cambios que dan como resultado que un hecho real, después de pasar por el boca a boca se torne fantástico y no se quede  en un pueblo;  viaja como a caballo buscando nuevos oídos con algún mate o caña de por medio para seguir enriqueciendo esa historia.

El poeta y escritor argentino Rafael Obligado  escribió el poema “Santos Vega” en 1885 inspirado en la obra del escritor costumbrista Eduardo Gutiérrez. En un folletín,  contó la historia del payador y de su amigo “Carmona” perseguidos en la justicia.

El poema se inscribe dentro de la estética romanticista, por l presencia de elementos típicos como el crepúsculo y el nacionalismo:

“Cuando la tarde se inclina

sollozando al occidente,

corre una sombra doliente

Sobre la pampa argentina”

Manuel Mujica Láinez, otro gran exponente de la literatura argentina, también le dedicó su pluma a Santos Vega.   En su obra “El ángel y el payador”, acuñada en la “Misteriosa Buenos Aires publicada porEditorial Sudamericana, 1950, se explaya sobre este personaje con una narrativa en lo histórico y social con el valor agregado de la tradición, construcción del pasado histórico y de la identidad nacional:

” Algunos lo pintan como un gaucho malo que se pasó la vida cobrando una deuda de sangre a los jueces de paz y acuchillando a cuanta partida de la ley se le cruzó en el camino. No es cierto. Así por lo menos lo declaraba mi antepasado. Puso su gloria en la guitarra y no necesitó andar marcando cristianos para merecer el respeto de los criollos: no porque no fuera valiente, entiéndanme bien, sino porque para él lo principal fue la guitarra”

Se encontraron sus restos en el paraje Las Tijeras, en el partido de General Lavalle , provincia de Buenos Aires,  en el año 1945. En 1948 se inauguraron en el lugar, situado a 10 km de la localidad de San Clemente del Tuyú un parque y un monumento a Santos Vega,

En 1983 se dispuso el traslado del monumento de Santos Vega, desde el paraje Las Tijeras, al parque Museo Histórico Regional de General Lavalle donde actualmente descansan sus restos.