Son muchos los especialistas que afirman que el desayuno es una de las comidas fundamentales para comenzar nuestro día. Es esencial aportarle al cuerpo los nutrientes necesarios para un buen arranque de jornada. Ahora bien, ¿qué pasa con los desayunos de los más pequeños?

Para este desayuno es necesario que hablemos del almidón de maíz, "este producto es fuente de hidratos de carbono, aporta principalmente energía al 100%. La energía es indispensable para crecer y esto es fundamental en los dos primeros años de vida, el crecimiento que se tiene en esta etapa es único e irrepetible, teniendo en cuenta que aquí se crece más que en el resto de los años. El almidón es de fácil acceso, se puede conseguir en cualquier supermercado o dietética, y al agregarlo en ciertas comidas da mayor satisfacción de saciedad, espesor y sabor", afirmó la licenciada en Nutrición, Laura Lía.

¡Ahora pasemos manos a la obra!

¿Qué necesitamos?

• 100 ML de leche de fórmula para bebes.
• 2 cucharitas de te de almidón de maíz.
• 2 vainillas.
• 1/2 cucharita de esencia de vainilla.

¿Cómo lo hacemos?

1. Ponemos a calentar la leche, a fuego muy bajo, y le sumamos las dos cucharitas de almidón, revolvemos hasta que rompa el hervor y se espese la preparación. Es importante revolver bien para que no queden grumos.
2. Retiramos del fuego.
3. En un platito o recipiente trituramos las vainillas hasta el punto de que queden migas, sumamos la leche espesa y la media cucharita de esencia de vainilla.

Es necesario probarlo antes de ofrecérselo a tu bebé para evaluar la temperatura del alimento. El ingrediente más importante de esta preparación es el amor ¡y a disfrutar!

Recordá preguntarle a tu médico de confianza ante cualquier inquietud