Los principales candidatos de las elecciones brasileñas y su programa de gobierno
Brasil elegirá presidente el próximo 2 de octubre. Un repaso por los principales candidatos, breve historia y sus propuestas económicas.
Por Ignacio Lautaro Pirotta | 11-09-2022 11:35hs
Brasil irá a las urnas el domingo 2 de octubre para elegir a su próximo presidente. Los principales protagonistas de la contienda son el actual presidente, Jair Bolsonaro, y el expresidente Lula da Silva. Entre ambos, concentran cerca del 80% de la intención de voto total.
Sin embargo, Bolsonaro y Lula no son los únicos protagonistas. Se destacan, además de ellos, Ciro Gomes, del Partido Democrático Laborista (PDT, por sus siglas en portugués) y Simone Tebet, del Movimiento Democrático Brasileño, el viejo PMDB de, entre otros, Michel Temer. Con algo menos de relevancia, siguen otros candidatos: Soraya Thornicke, del Unión Brasil; el empresario Felipe Dávila, del liberal NOVO, e incluso Roberto Jefferson, el candidato que realiza campaña desde su casa por estar cumpliendo una prisión domiciliaria, entre otros nombres.
La última encuesta publicada por la empresa Datafolha muestra que Lula da Silva continúa liderando con el 45% de intención de voto, aunque Jair Bolsonaro ha recortado la distancia, llegando al 34%. Así, la diferencia entre Lula y Bolsonaro continúa achicándose lenta pero persistentemente y hoy es de 11 puntos, habiendo llegado a ser de 26 puntos en diciembre pasado y de 21 en mayo. De la totalidad de 12 candidatos, los que merecen más atención son los primeros cuatro, es decir, Lula, Bolsonaro; y Ciro Gomes y Simone Tebet. Estos últimos tienen, respectivamente, 7 y 5 puntos de intención de voto, según la encuesta Datafolha publicada el pasado viernes 9.
Conociendo a los candidatos
Lula da Silva fue presidente de Brasil entre 2003 y 2010, siendo recordado por, entre otras cosas, haber sacado de la pobreza a más de 30 millones de brasileños. Además, durante sus gobiernos y el de su sucesora, Dilma Rousseff, hubo una política agresiva de combate al hambre, la cual llegó a ser prácticamente erradicada del país hacia 2014. Con los gobierno de Lula y su modelo volcado al mercado interno hubo un fuerte crecimiento de la economía y del empleo, llegando a niveles de ocupación casi plenos. Esa “época dorada” de las presidencias de Lula es el principal capital político que tiene el candidato, y su discurso se centra en gran medida en la reivindicación y el recuerdo de aquellos años.
Jair Bolsonaro llegó al poder en 2018 luego de ser diputado nacional por casi 30 años. A pesar de su larga trayectoria política, el hecho de ser un actor secundario de la política nacional le permitió sostener un fuerte discurso contra la política y “el sistema”, ganando la elección en un contexto marcado por la desconfianza de la población hacia la clase política. Otros ejes centrales de su liderazgo han sido el conservadurismo, resumido en el eslogan “en defensa de la familia tradicional brasileña” y el liberalismo económico. No obstante, durante sus casi 4 años de mandato no ha estado exento de contradicciones, realizando alianzas políticas con partidos fuertemente cuestionados y un fuerte gasto público de cara a las elecciones.
Ciro Gomes, de la centroizquierda, es el tercero colocado en las encuestas desde hace más de un año y también fue tercero en las elecciones presidenciales de 2018, con un 12%. Su partido, el PDT, levanta las banderas de Getúlio Vargas, el líder de tipo popular y nacionalista que fue presidente entre de 1930 a 1945 y luego entre 1951 y 1954.
El programa económico de Ciro Gomes es el más ambicioso y detallado de todos los candidatos, con un fuerte rol del Estado. Incluso, su programa económico contempla cambios más profundos que el impulsado por Lula da Silva.
Es el programa económico la gran diferencia que el candidato del PDT ha tenido con Simone Tebet, del MDB, la cuarta en las encuestas. En más de una oportunidad llegó a haber gestos por una aproximación entre ambos candidatos de la llamada tercera vía. Sin embargo, las diferencias del programa económico imposibilitaron ese acercamiento. Tebet abraza el ideario liberal, con un rol mucho menor del Estado en la economía y en continuidad con lo que fue el programa de Michel Temer, que gobernó luego de la remoción de Dilma Rousseff (PT) mediante juicio político, entre 2016 y 2018.
No obstante, Tebet, que es candidata a la presidencia por primera vez, también ha introducido novedades al MDB. El feminismo ocupa un lugar destacado en su discurso y la fórmula electoral se completa con otra mujer, Mara Gabrilli. También ha incorporado en mayor medida que Temer propuestas sociales y de combate al hambre. Incluso su programa ha ido en contra, parcialmente, de una de las vacas sagradas de Temer y la ortodoxia dominante en Brasil, el llamado “techo de gastos”. El techo de gastos fue instituido durante la presidencia de Temer y estipula un límite al presupuesto anual, congelándolo en términos reales por 20 años (permitiendo apenas una actualización por inflación). Tebet ya ha dicho que el techo sería “perforado” en el primer año de su gobierno, en función de poder cumplir con las políticas sociales y de que esa presión sobre la política fiscal ya ha sido impuesta para 2023 por el actual gobierno de Bolsonaro.
Principales puntos de los programas económicos
El programa de Lula da Silva (PT) propone el fin del techo de gastos; la revisión de la reforma laboral implementada en 2017; una revisión de la reforma previsional que aprobó Bolsonaro en 2019; una reforma tributaria progresiva, donde los más ricos paguen más y los más pobres menos. Otro punto importante es que propone el fin de la política de paridad de precios internacionales de Petrobras. En cuanto a la reforma laboral, que fue aprobada con Temer, en 2017, es una clara muestra de los esfuerzos conciliadores de Lula el hecho de que haya pasado de proponer su “derogación” (algo que suscitó críticas del empresariado) a proponer una “revisión” de la reforma.
En el programa de gobierno de Jair Bolsonaro (PL) cobra un lugar destacado el concepto de libertad, el cual es uno de los principales elementos de su discurso de campaña. Una parte del programa repite una frase de Bolsonaro durante la pandemia y cuando se oponía al aislamiento decretado por los gobernadores: “La libertad es tan importante como la propia vida”. Bolsonaro contrapone “libertad” a “comunismo” y “socialismo” y conecta estos segundos a las crisis económicas de países como Argentina y Venezuela, no sin significativas dosis de desinformación.
Pero la palabra “libertad” también atraviesa los distintos ejes de su programa, colocando el acento en la “libertad económica”, “libertad religiosa”, “libertad para el uso responsable de los recursos naturales” y “libertad para la defensa de los derechos”.
En el plano económico sostiene que la libertad económica es el mecanismo adecuado para promover el bienestar social, defendiendo un Estado con menos atribuciones y promoviendo más privatizaciones. También propone una reforma tributaria con suba del piso del impuesto a la renta y una reforma de la administración pública, aunque solo especifica que sería para “valorar a los servidores públicos”.
El programa de Ciro Gomes (PDT) es el más exhaustivo y detallado, al punto que el partido no pudo subir la totalidad del mismo al registro del Tribunal Electoral porque superaba el tamaño permitido por la plataforma. Las principales propuestas de su programa están contenidas en el libro que Ciro Gomes publicó en 2020, “Proyecto Nacional: el deber de la esperanza”.
Como se mencionó, el programa económico de Ciro es el más estatista de todos. Propone un aumento del presupuesto del Estado cobrando impuesto a las grandes fortunas y más impuestos de renta, reduciendo incentivos y subsidios al sector privado. Por otro lado, propone la reducción de los impuestos al consumo; una reforma previsional y un modelo de desarrollo basado en un rol protagónico del Banco Nacional de Desarrollo (BNDES) para el financiamiento de las industrias del agro, petróleo, salud y defensa. Además, Ciro Gomes propone la compra de más acciones de la Petrobras por parte del Estado (Hoy tiene el 51%) con reservas del Banco Central.
Simone Tebet (MDB) propone la continuidad del techo de gastos, aunque, como se mencionó, permitiría que en el primer año de gobierno el límite de gasto sea excedido. También propone el regreso al llamado “trípode económico”, que fueron los tres grandes componentes que guiaron la política económica desde fines de los noventa: metas de inflación, meta fiscal superavitaria y tipo de cambio flotante. Además promoverá las privatizaciones con el fin de generar “más competencia, eficiencia y aumento de la productividad”.
Para ganar la elección en primera vuelta el candidato debe obtener la mayoría absoluta de los votos válidos, es decir más del 50% excluyendo los votos en blanco y nulos. La misma regla puede ser formulada de una manera más comprensible: para ganar en primera vuelta, es necesario sacar más votos que la suma de todos los rivales juntos.
Las encuestas vienen mostrando que los indecisos se han volcado mayormente a los adversarios de Lula, haciendo que las posibilidades de un triunfo en primera vuelta de este queden más lejos. Por ello, todo apunta a que habrá una segunda vuelta entre Lula da Silva y Jair Bolsonaro, la cual tendría lugar el 30 de octubre