De acuerdo a una investigación periodística, compañías petroleras ocultaron el cambio climático
La docuserie de PBS Frontline está basada en más de 100 entrevistas y miles de documentos. Muestra el poder del lobby petrolero estadounidense contra las medidas para frenar el cambio climático durante décadas.
Por Ignacio Lautaro Pirotta | 24-05-2022 10:16hs
En abril pasado, PBS Frontline lanzó una docuserie de tres episodios en la que denuncia que grandes empresas petroleras ocultaron información sobre el cambio climático desde fines de los años 70, bloquearon legislación para combatirlo y promovieron campañas para poner en duda el fenómeno o directamente negarlo.
El documental de PBS Frontline investigó el rol de las petroleras estadounidenses, especialmente Exxon, en retrasar y evitar acciones contra el cambio climático durante décadas. La investigación está basada en más de 100 entrevistas y miles de documentos. Los tres episodios, que pueden verse en inglés en YouTube, totalizan 3 horas y media de documental y abarcan desde fines de los 70 hasta la actual administración de Joe Biden.
En el primer episodio puede verse cómo Exxon, una de las grandes petroleras estadounidenses, comenzó a mediados de los años 70 a investigar el fenómeno del cambio climático. Para ello formó un equipo de científicos, entre los que se encontraba Edward Garvey, quien brindó un valioso testimonio en el documental. Garvey cuenta que fue reclutado por Exxon en la década del 70, cuando estaba en la universidad.
En uno de los documentos hallados por la investigación puede leerse que el objetivo de Exxon era “formar un equipo responsable de las investigaciones que pueda llevar malas noticias, si las hay, a la corporación”. Según Garvey, los más altos funcionarios de la compañía estaban interesados en tener información sobre esa investigación. La periodista Neela Banerjee, quien tuvo acceso al archivo documental de Exxon, cuenta que los directivos dejaron constancia fehaciente, en diferentes informes y memos, de tener conocimiento de la información sobre el cambio climático y los gases de efecto invernadero producida por el equipo de investigación. “Siempre creí que Exxon iba a poner el asunto sobre la mesa, y que sería parte de la solución, no que negaría el problema”, cuenta el investigador Edward Garvey.
Lo cierto es que a inicios de los ochenta Exxon dejó de lado el desarrollo de energías alternativas, como baterías de litio y paneles solares, que venía realizando desde los 70, y nunca dio a conocer los resultados de las investigaciones. Por el contrario, la compañía comenzó a prepararse para bloquear cualquier legislación promovida por el Gobierno estadounidense para combatir el cambio climático y que perjudicara los intereses de la industria petrolera.
El tema del cambio climático fue incorporado en la agenda del Congreso estadounidense por un grupo de senadores, quienes hacia el año 1988 organizaron una audiencia sobre el asunto. De la misma participó como invitado estrella James Hansen, director del Instituto Goddard de la NASA, entre 1981 y 2013. Allí, Hansen presentó en la audiencia los resultados de su investigación sobre los gases de efecto invernadero, y afirmó: “Me gustaría exponer tres conclusiones principales. 1) la temperatura de la Tierra en 1988 es la más alta que en cualquier otro momento de en la historia de las mediciones, 2) el calentamiento global es ahora lo suficientemente grande como para sostener que hay una relación de causa y efecto entre este y la emisión de gases de efecto invernadero, y 3) nuestras simulaciones indican que el efecto invernadero ya es lo suficientemente grande como para comenzar a afectar la probabilidad de eventos extremos, tales como las olas de calor. Junta, toda esta evidencia indica que el efecto invernadero ha sido detectado y está cambiando nuestro clima ahora mismo”.
Más que promover la acción del gobierno en contra del cambio climático, el documental muestra que aquella audiencia sirvió como puntapié para que la industria petrolera lance un fuerte y efectivo contraataque.
El primer paso tomado por la industria fue sembrar la incertidumbre y el escepticismo respecto a los hallazgos científicos sobre cambio climático y la incidencia de los gases de efecto invernadero, que para entonces ya eran reflejados por los grandes medios de comunicación, generando presión sobre la industria. Para llevar adelante su estrategia de sembrar escepticismo en la opinión pública, las petroleras comenzaron a operar por medio de una serie de organizaciones, entre las que se destacaron el Instituto Americano del Petróleo y la Coalición del Cambio Global. Desde allí se elaboraron informes con posibles vías de acción, que luego fueron implementadas por periodistas y científicos dispuestos a reflejar los puntos de vista de la industria en los medios de comunicación y cuestionar los hallazgos respaldados por el grueso de la comunidad científica.
Sin embargo, esa estrategia sirvió para demorar la toma de decisiones durante algún tiempo, pero a mediados de los noventa el avance de las investigaciones científicas era difícil de relativizar. En síntesis, las petroleras estaban perdiendo el debate científico. En 1995, la propuesta del recién llegado presidente Bill Clinton de poner un impuesto a la emisión de carbono representó el momento justo para una acción con un enfoque económico del problema.
Las petroleras promovieron en la opinión pública los argumentos de que el impuesto al carbono de Clinton significaría un fuerte incremento del costo de vida e incluso la pérdida de puestos de trabajo. Además, se ponía de manifiesto que Estados Unidos iniciaría esas políticas sin compromiso de otros países para realizar esfuerzos semejantes, lo cual redundaría en una pérdida de competitividad del país frente a sus competidores.
En ese momento el documental se centra en la pequeña compañíaKoch Industries, especializada en refinar y distribuir parte del petróleo más pesado y sucio. Los directivos de Koch financiaron a un grupo activista de fachada, llamado Cato. Junto con Koch actuaron en el lobby en el Congreso las ya mencionadas Instituto Americano del Petróleo y la Coalición del Cambio Global. Estos grupos centraron su presión en el presidente de la Comisión de Presupuesto, David Boren. El resultado del lobby fue que Boren quitó del presupuesto de Clinton el impuesto al carbono.
El documental prosigue hasta el presente, mostrando cómo el lobby logró su cometido de frenar cualquier legislación contra el cambio climático también en las administraciones de Bush, Obama y Trump, al tiempo que los efectos del cambio climático se hacen cada vez más evidentes.