¿Argentina podrá ser potencia en legumbres?
Por Luis Chervo | 10-02-2021 04:30hs
El 10 de febrero se celebra el "Día Mundial de las Legumbres". Esta fecha fue instituida por la Organización de Naciones Unidas para que la sociedad en su conjunto tome conciencia colectiva "acerca de los beneficios que aportan las legumbres y su contribución a los sistemas alimentarios sostenibles y a un mundo sin hambre", según establece la FAO. Así fue que el 20 de Diciembre de 2013, a través de la Asamblea General de ONU se dispuso que el año 2016 se determine como el Año Internacional de las Legumbres y, en el año 2019 por medio de una propuesta de Burkina Faso, se dispuso que cada 10 de febrero se recuerde a las legumbres.
Las legumbres contribuyen a la seguridad alimentaria. Con el objetivo de combatir el hambre en el mundo y llegar, lo antes posible a la meta del "hambre cero", generando un sistema sostenible para todos, las legumbres tienen mucho que aportar. Son, desde el inicio de los tiempos, la manera de mantener la alimentación, de mantener la vida. Esas semillas multicolores han sido alimentos nutritivos, que acompañan desde una sopa en invierno, hasta una ensalada en verano.
Son las legumbres una fuente de nutrientes y de alto contenido de proteínas, en particular en zonas del planeta en donde las carnes y los lácteos son escasos o de casi imposible existencia. Otro motivo de consumo, es que son alimentos bajos en grasas y muy ricos en fibras, lo cual produce poco colesterol y un buen control de azúcar en sangre. Estas características son la razón por la cual los médicos, en sociedades como la Argentina, piden elevar su consumo para hacer frente a las enfermedades no transmisibles, como la diabetes y las enfermedades cardíacas; en especial, son indicados en los tratamientos contra la obesidad.
Las legumbres cumplen funciones de estabilidad en las sociedades que la producen. Primero se asegura una alimentación diaria y barata, para quien la produce y sus familias, segundo son siempre una salida de venta rápida y simple, que genera certezas en la economía del hogar de quienes la producen.
No menos importantes son los beneficios medioambientales que este tipo de cultivos trae consigo: fijan el nitrógeno atmosférico en los suelos, mejorando la fertilidad y el aumento de la productividad de las tierras. Existe en la práctica intensiva de cultivo de las legumbres algo que se da de hecho y que beneficia al planeta: la siembra intercalada y de cobertura, por lo que se promueve naturalmente la biodiversidad agrícola y del suelo. Esto también favorece al control natural de las plagas y las enfermedades nocivas, llevando a contribuir a la migración del cambio climático, reduciendo la dependencia de los fertilizantes sintéticos utilizados para aportar nitrógeno al suelo, los cuales durante la fabricación y aplicación liberan gases de efecto invernadero y su uso excesivo puede ser perjudicial para el medio ambiente.
El hombre y la mujer cultivan este tipo de semillas nutritivas desde hace unos 11.000 años, pero si se cumplen las proyecciones, para el año 2050, se podrá doblar la producción actual a nivel mundial. Por lo cual debemos, a través de los Gobiernos y de las ONG's, incentivar el consumo de este bien alimentario.
Argentina, es un importante productor de legumbres.Según datos oficiales del último relevamiento, realizado por el Ministerio de Agroindustria en el año 2016, la producción de 601.000 hectáreas cultivadas alcanzó las 662.000 toneladas anuales; en un marco mundial de 68 millones de toneladas de producción anual y con un comercio internacional de 12 millones de toneladas.
Nuestro país exporta el 97% de lo que produce, por el poco consumo interno, de solo un 3% anual. Las semillas que más se producen, por su demanda para el comercio internacional son porotos, cuyo principal comprador es Brasil. El país vecino compra anualmente: 183.000 toneladas de porotos negros, 177.000 toneladas de porotos alubia (que también se proveen a países como Argelia, Turquía, Italia, España), y 144.000 toneladas de arvejas verdes y algo de amarillas.
A nivel Nacional, se destacan en la producción de legumbres las provincias de Salta, liderando con el 35,3% de la producción, sigue Jujuy con el 16.8%, Buenos Aires con el 13,1%, Córdoba con el 12,5% y Tucumán con el 10,4%.
Este rubro de la agricultura debería ser tomado como política de Estado y actualizar los niveles de producción. El Ministerio no provee datos de la misma desde 2017, esto demuestra que no es de interés; pero reiteramos, debería serlo para colaborar con el hambre, que Argentina también sufre. Recordemos que uno de cada dos niños en este país, que se jacta de ser un país productor de alimentos, es pobre.
Te invitamos a leer: La industria aceitera celebró el acuerdo con el Gobierno que 'protege a los consumidores y al comercio exterior'